La celebración de la "Noche de luna llena", para apoyar la candidatura de Segovia como capital cultural europea 2016, ha comenzado con la degustación de una maqueta comestible del casco histórico y de los principales monumentos de esta ciudad Patrimonio de la Humanidad.

Bajo la dirección de Alicia Ríos, psicóloga, cocinera e historiadora, y la propuesta de que el ciudadano se coma su entorno, en el proyecto han trabajado más de 130 personas, algunos representantes de asociaciones y hosteleros.

Se podrá degustar un acueducto construido con sillares de cochinillo confitado y hojaldre, una catedral de bizcocho cubierto de masa quebrada o un alcázar de bizcocho y merengue con frambuesa.

Del conjunto de iglesias románicas, en la maqueta, la de San Andrés es de chorizo y la de San Juan de los Caballeros se ha confeccionado a base de oreja de cerdo, mientras que la casa de la moneda se ha construido con doblones de chocolate y el barrio de la judería a base de tostas de berenjena y cordero.

El jardín de la Alameda del Parral cuenta con todo tipo de verduras, embutidos, panes y dulces, hasta contar con árboles de las formas más variopintas.

Esta Segovia histórica a escala, cuyo primer bocado ha probado el alcalde, Pedro Arahuetes (PSOE), tiene calles de mazapán y farolas de regaliz con gominolas o de chupa-chups.

Hasta la madrugada se van desarrollar más de treinta actividades en una apuesta por el papel del museo y de los espacios expositivos de la ciudad y su proyección en el territorio, aparte de conciertos y otras manifestaciones culturales.

La directora de la Oficina 2016, Nuria Preciado, ha dicho a EFE que el mapa de esta noche se construye a través de un itinerario ficticio entre los museos, salas de exposiciones, públicos, artistas y el espacio urbano.

Ante la eventualidad de lluvia la organización ha cambiado de ubicación algunas actividades, como músicas, bailes y canciones tradicionales del Mediterráneo, de Urbàlia Rurana, o "La Linterna Mágica" de Play the Magic.

El presupuesto del programa es de 80.000 euros e intervienen en la coordinación más de 70 personas, incluidos 40 voluntarios.-