Joaquim "Purito" Rodríguez, ganador de la decimocuarta etapa de la Vuelta en Peña Cabarga, ha dicho que hoy que "no quería" que le "pasase lo de Pal", la etapa en la que perdió un minuto respecto al ganador por querer seguir el ritmo de Ezequiel Mosquera, que no consiguió.

"No quería que me pasase lo de Pal, donde me calenté. No es que me fallaran las fuerzas, fue exceso de confianza. Si hubiera corrido con la cabeza y no con las piernas hubiese podido ser tercero y no perder tiempo, aunque tampoco estar con Igor (Antón). Pero hoy he corrido con la cabeza y con inteligencia. He sabido regular, esperar mi distancia y me ha salido. Estoy muy contento", se ha felicitado.

Purito, no obstante, ha lamentado la caída del líder Igor Antón, quien a juicio del corredor catalán "era el más fuerte". "No sabía que se había caído Igor Antón, es una pena que se haya retirado porque era el más fuerte y se le veía con una soltura espacial. Está claro que no le ha mirado la suerte", señaló Purito.

Al respecto de lo que le ha pasado al anterior líder, ha dicho que "ha sido una caída muy mala, tan cerca del puerto y con todo el mundo intentando colocarse para empezar la subida en cabeza". "No la he visto y lo que menos te imaginas en situaciones así es que el que se ha caído es el líder", ha explicado.

El corredor del Katusha dijo que ahora "la Vuelta cobra otra dimensión" y que, como en las primeras etapas, no hay "ningún líder" claro para dominar la carrera una vez retirado el anterior maillot rojo, al que sí le veía con "la oportunidad de ganar la Vuelta" tras "su exhibición en Andorra".

"Ahora habrá que ver quién coge la responsabilidad, aunque supongo que será Nibali, por la crono que tiene por delante", ha apuntado.

"Quien la sigue la consigue", ha resumido su estado de animo el corredor español, quien, con 31 años, 10 de carrera profesional, ha sumado hoy su vitoria número 19, la segunda en la Vuelta y la tercera en una gran vuelta por etapas.

Purito también ha explicado que "el día empezó mal" para él porque le "picó una avispa en un ojo" y ha "entrado en meta sin ver nada". Aunque se congratula de que le ha vuelto a "motivar la victoria cien por cien" y vuelve "a luchar por todo" en la carrera.