Este artículo se publicó hace 15 años.
Rafael Amargo contempla su trabajo como actor como seria alternativa al baile
El bailarín y coreógrafo Rafael Amargo aseguró hoy que aunque nunca se desvinculará del mundo de la danza, contempla su incipiente trabajo como actor como una alternativa.
"El que nace bailando se muere bailando, pero hay un momento en que hay que dejar la danza y me planteo la actuación como una alternativa", dijo en una entrevista con EFE durante su participación en la II edición del Festival de la Infancia de El Aaiún.
Al bailarín que ha acudido a la capital del Sahara Occidental para bailar "con todo el amor y todo el duende" para recaudar fondos a favor de los niños huérfanos de esa ciudad, le esperan próximamente rodajes en Argentina e Italia.
"Llevo mucho tiempo empezando una carrera como actor. En España me resulta muy difícil porque tengo una carrera muy sólida como coreógrafo y bailarín, y por eso he empezado a hacer cosas fuera", aseguró.
Rafael Amargo, nombre artístico del granadino Jesús Rafael García, añadió que ser un artista multidisciplinar "no es una manera de afrontar la crisis, sino de hacer en cada momento lo que uno siente y lo que uno quiere".
De momento a El Aaiún lleva dos números, "uno más alegre y otro más triste", de su espectáculo "Tiempo Muerto", un montaje estrenado en 2007 y con el que el granadino afirmó en su día que retomaba su lado más flamenco.
A Amargo se le unirán también en este festival la cantante española Rosa López y el grupo Las Ketchup, dentro de un evento que cuenta con el patrocino del monarca, Mohamed VI y que ha sido organizado con el lema "Invertir en la infancia es invertir en el futuro".
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