Rajoy vuelve a enarbolar la bajada de impuestos

Bajar impuestos sigue siendo el eje central del discurso económico del Partido Popular y su vía para salir de la crisis. Sin embargo, el "plan anticrisis completo y global"como lo denomina Mariano Rajoy no explica cómo mantener el gasto público productivo y las políticas sociales con una menor recaudación. Su argumento es, simplemente, que "menos impuestos no significan menor recaudación" y tan sólo enuncia una contención del gasto público para que no crezca más del 2% en los próximos años. Pero, en estos momentos, el problema del déficit público está provocado fundamentalmente por la caída de ingresos y por el aumento de un gasto imposible de reducir: el de las prestaciones por desempleo.

Además, el PP sugiere un mayor esfuerzo de inversión en infraestructuras, pero sin especificar cuánto ni de dónde saldría el dinero.

La reforma fiscal es la más concreta de todas las propuestas del PP; no en vano, su portavoz económico en el Congreso, Cristóbal Montoro, fue ministro de Hacienda. Entre las medidas, destaca la sustitución de la deducción en el IRPF de 400 euros a una similar en las cotizaciones sociales con cargo al trabajador si se hacen en el IRPF, los que no tienen retenciones o son inferiores a 400 euros no se benefician en su totalidad. Hasta ahora, las cotizaciones sociales, que son las que sirven para pagar las pensiones contributivas, no se tocaban. El PP abriría así la puerta a la reducción de cotizaciones sociales, algo que reclama la patronal hace años.

Para las pymes y los autónomos propone medidas que ya están siendo estudiadas por el Gobierno, como una línea de avales del ICO para el pago de facturas pendientes. E insiste en bajar el tipo del Impuesto de Sociedades al 20% para pymes (el Gobierno socialista lo bajó al 25% para éstas y al 30% para el resto de empresas).

Pensiones

En el tema de pensiones, las propuestas del Partido Popular no aportan nada nuevo a lo que se está haciendo: aumento de la contributividad (que lo que se cobre de pensión esté en relación con lo cotizado) y aumento del Fondo de Reserva de la Seguridad Social que todos los años desde su creación ha aumentado; el año pasado, en 9.400 millones de euros hasta alcanzar los 57.223 millones.

En política energética recomienda analizar todas las posibilidades en energías renovables y estudiar las posibles interconexiones eléctricas internacionales, entre otras medidas. También son medidas que se están haciendo: el Gobierno pretende aprobar antes del verano un proyecto de ley de eficiencia energética y energías renovables y están funcionando o en marcha interconexiones con Portugal, Marruecos, Francia (aprobada con el PSOE después de 14 años de intentos), y en julio se inaugura el gasoducto que une Almería con Argelia.

En cuanto a la reestructuración del sistema financiero, defiende recuperar la viabilidad de las entidades con problemas de solvencia, pero "evitando un proceso de recapitalización indiscriminado", palabras que recuerdan a Pedro Solbes, al que tanto criticó el PP.