Rajoy y Aznar apelan a la figura Cisneros ante quienes quiebran la concordia nacional

El líder del PP, Mariano Rajoy, y ex jefe del Gobierno José María Aznar han definido hoy a Gabriel Cisneros como un "gran patriota" que "jamás cedió ante los enemigos de la nación", y han apelado a su figura en un momento en el que "algunos han querido quebrar irresponsablemente la concordia nacional".

El grupo parlamentario popular ha rendido hoy un emotivo homenaje a Gabriel Cisneros, diputado del PP y ponente de la Constitución que falleció el pasado 27 de julio, en un acto, al que asistió su hija y que ha sido abierto por el presidente del Congreso, Manuel Marín, y cerrado por Rajoy.

José María Aznar también ha participado en este homenaje, al que acudieron prácticamente todos los diputados populares, así como la cúpula del PP, encabezada por Rajoy, Ángel Acebes y Eduardo Zaplana.

En su intervención, Rajoy ha calificado a Cisneros de "extraordinario parlamentario y hombre de bien" y ha añadido que en él "están recogidas las virtudes de la política con mayúsculas".

Se ha referido a la labor que hizo en la redacción de la Carta Magna y ha dicho que la "única y verdadera ley de memoria histórica es la Constitución" porque "suturó la herida de las dos Españas".

"Ahora cuando algunos han decidido dejar de ser fieles al espíritu de la Transición y han querido quebrar irresponsablemente la concordia nacional, se hace más imprescindible que nunca volver a Gabriel Cisneros y a lo que hemos llamado un nuevo consenso" que apele a la "sensatez y la moderación", ha agregado.

Para el líder de la oposición "sin muchos hombres como Gabriel nunca hubiera sido posible la democracia española".

José María Aznar le ha definido como un "gran patriota". "Fue un padre de la patria, pero también un político honrado, cabal, comprometido y consecuente", ha dicho, antes de calificarle como un "maestro en el arte de los acuerdos políticos".

Ha recordado el atentado terrorista que sufrió por su "firme defensa de la nación y su inquebrantable lealtad a los valores de la Constitución y de la Transición". "Mantuvo la cabeza alta y jamás cedió ante los enemigos de la nación", ha añadido.

También ha señalado que este padre de la Constitución se hizo monárquico cuando comprendió que ésta es la "mejor garantía de convivencia en libertad para España".

Aznar ha señalado que Cisneros en la última etapa de su vida estaba "muy preocupado" por las "heridas infligidas" a la Constitución y de ahí su empeño en defender una reforma del texto.

Zaplana se ha referido a su calidad humana y ha señalado que, como ponente de la Constitución, fue "víctima del mayor enemigo del proyecto de convivencia y libertad que tiene España, ETA", y ha dicho que en sus últimos meses de vida le preocupaba mucho este "proceso de ruptura del consenso".

El acto comenzó con la intervención de Manuel Marín, quien ha recordado que, a pesar de sus discrepancias políticas con Cisneros, ambos compartían el respeto y el sentido del límite.

También intervinieron amigos y compañeros de Cisneros, entre ellos el presidente del Tribunal de Cuentas, Manuel Núñez, quien leyó una carta dirigida a su amigo, de quien destacó su talla humana, y en la que recordó su gran labor en la elaboración de la Constitución, "hoy tan peligrosamente zarandeada".

El diputado de UPN Jaime Ignacio del Burgo ha lamentado que falleciera cuando más falta hacia su sabiduría, su experiencia, su memoria histórica, su honradez y su compromiso con España, a la vez que ha destacado su comprensión y afecto hacia Navarra.

En tanto que el alcalde de Burgos, Juan Carlos Aparicio, recordó que conoció a Cisneros en 1989 y que entonces le dio "clases de paciencia", el secretario de Justicia del PP, Ignacio Astarloa, dijo que "encarnaba en primera persona la Transición y sus valores". "Por eso ha sufrido tanto en esta legislatura de rupturas incomprensibles", añadió.