Mariano Rajoy ha aprovechado los malos datos del paro para atacar al Gobierno. En un periplo por varias provincias castellanomanchegas, que le ha llevado desde Cuenca a Toledo, Rajoy, ante centenares de simpatizantes del partido, se ha mostrado convencido de que de que su partido ganará las próximas elecciones europeas y que dicha victoria será el principio de los siguientes triunfos electorales, por lo que ha afirmado: 'Si Zapatero no hace las maletas, se las vais a hacer vosotros'.

Acompañado por la presidenta del PP en Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, y por el responsable de los populares en Toledo, Arturo García-Tizón, Rajoy ha apelado al apoyo de los ciudadanos para vencer en las próximas elecciones europeas y para iniciar así el camino hacia el Palacio de La Moncloa.

'Y si -el presidente del Gobierno- José Luis Rodríguez Zapatero no hace las maletas, se las vais a hacer vosotros', ha dicho. Su intervención, no obstante, la ha centrado en la crisis económica y en la tasa de paro, que hoy, según la Encuesta de Población Activa (EPA), se ha situado en el 17% y en más de cuatro millones de personas.

Además, ha vuelto a confrontar la gestión del actual Gobierno con la del primero de José María Aznar, en 1996, pues aquél, a diferencia de lo que hace el actual, ha dicho, 'dio la cara, tomó decisiones y consiguió los mejores diez años de prosperidad económica del país'. Zapatero, en cambio, 'ha dilapidado' esa herencia, 'la mejor que ha recibido nunca un Gobierno en democracia'. 'Se la ha cargado', ha apostillado acto seguido.

Ha puesto como ejemplo las críticas que varios integrantes del Ejecutivo efectuaron al gobernador del Banco de España por advertir de la posibilidad de que haya que reformar el sistema de pensiones. 'Les dice que empieza a haber problemas, y en vez de coger el toro por los cuernos, le ponen de chupa de dómine, y a quien nombraron ellos. Lo que tiene que hacer un Gobierno es ocuparse de lo que pasa hoy y pasará en el futuro', ha resumido. Rajoy ha insistido en que la austeridad en el gasto y generar confianza, lo que supone 'decir la verdad', son prioridades para comenzar a dejar atrás la crisis.

En esta línea, ha recordado que el PP presentó la semana pasada un programa con medidas económicas de muy diversa índole que quiere negociar con las fuerzas políticas para que 'lo utilicen, lo apliquen y lo voten en el Congreso'. 'Y, si no, volveremos a presentarlo, pues de esta crisis se va a salir', ha puntualizado para recalcar justo después: 'El problema es que con lo que hay ahí -en alusión al Gobierno de Zapatero- saldremos más tarde'.

De Cospedal ha seguido los patrones del discurso de Rajoy, pues ha asegurado que la victoria del PP en las elecciones europeas del 7 de junio significará un mensaje al presidente del Gobierno: 'Le vamos a decir a Zapatero que ya puede ir preparando las maletas'. Ha reclamado que en tiempos de crisis 'hacen falta propuestas valientes' y 'hombres y mujeres con determinación para salir de la crisis y ayudar a la gente a trabajar, no a recibir la prestación por desempleo'.

El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha asegurado este  que el Gobierno no defiende los intereses de los agricultores en Europa, y lo ha expresado de este modo: 'Al Gobierno que hay ahora, el campo le importa un carajo'.

Rajoy ha visitado este viernes la localidad conquense de Las Pedroñeras dentro del periplo por varias provincias de Castilla-La Mancha que efectuará a lo largo de la jornada con la presidenta del partido en la comunidad, María Dolores de Cospedal.

En Las Pedroñeras, en un acto con militantes populares, el líder del PP no ha eludido referencias a la situación de la agricultura, y más en Castilla-La Mancha, y, así, ha confrontado la gestión de algunos ministros populares, como Loyola de Palacio o Miguel Arias Cañete, con la del Ejecutivo actual.

Concretamente ha criticado que el Gobierno no defienda en Europa los intereses de los agricultores españoles: 'A Europa no se va sólo a dar abrazos, sino a defender los intereses nacionales, que es lo que hacen los ingleses, los franceses, cualquiera con un mínimo de orgullo, pero eso no lo hace el Gobierno', ha dicho