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Se reducen los vientos y las lluvias pero el panorama en Cuba es desolador

EFE

Los vientos y las lluvias en Cuba van menguando hoy, a medida que el huracán "Ike" se aleja de su costa norte por el Golfo de México hacia Estados Unidos, pero deja atrás al menos cuatro muertos, veinte heridos y un panorama social y económico desolador.

En un país que ya vivía en economía de guerra antes de que lo arrasaran dos huracanes en apenas diez días, cientos de miles de familias se quedaron sin casa o tienen sus viviendas seriamente dañadas.

El huracán "Gustav" destruyó total o parcialmente 140.000 casas el sábado 30 de agosto en la provincia occidental de Pinar del Río, según fuentes oficiales, y desde el domingo llegan reportes de destrozos similares en el centro y oriente de Cuba.

Se trata de un desafío colosal para el gobierno que preside el general Raúl Castro, atrasado en su meta de construir 50.000 casas al año y con un déficit de un millón de viviendas.

Se acumulan sin pausa los informes sobre cosechas destruidas o en riesgo, pueblos que siguen inundados, redes eléctricas y telefónicas derruidas, industrias paralizadas, y escuelas, centros de salud y otros edificios derribados en todo el país.

El primer vicepresidente cubano, José Ramón Machado, habló de la destrucción de numerosos puentes y carreteras, y pidió a la población comprensión y paciencia porque la recuperación no será asunto de unos pocos días.

"La economía nuestra está sufriendo un golpe muy duro", dijo Machado en declaraciones difundidas por medios oficiales.

Muchos barrios de La Habana, al igual que en muchas otras poblaciones, siguen sin energía eléctrica ni otros servicios.

La producción cubana del níquel, una de las principales fuentes de divisas de la isla, fue suspendida temporalmente por el huracán, informó el ministerio de la Industria Básica.

"Ike" se aleja lentamente de Cuba, pero las copiosas lluvias que lo acompañan "siguen siendo un factor muy peligroso", advirtió hoy el Instituto de Meteorología (Insmet).

Hay precipitaciones intensas en el occidente y centro de la isla, entre las provincias de Pinar del Río y Sancti-Spíritus, incluyendo a la Isla de la Juventud y la ciudad de La Habana.

"Estas lluvias serán fuertes e intensas en varias localidades, y pueden ocasionar inundaciones y desprendimientos de tierra, sobre todo en zonas montañosas y en lugares donde hay ya acumulados importantes de precipitaciones", alerta el Insmet.

En Pinar del Río corresponsales de Efe constataron lluvias torrenciales y el corte de la autopista principal de Cuba en al menos dos puntos.

También siguen las marejadas fuertes, con peligro para la navegación y posibles inundaciones costeras.

El huracán sigue intensificándose sobre las cálidas aguas del Golfo del México y sus vientos máximos sostenidos son ya de 140 kilómetros por hora, con rachas superiores.

Es un huracán de categoría 1 en la escala Saffir-Simpson de 5, pero los meteorólogos indican que volverá a recuperar el nivel 3, con el que llegó a Cuba el domingo, e incluso el 4, como al pasar antes por Haití y causar 66 muertes.

Más de 2,6 millones de cubanos, el 23 por ciento del total, fueron evacuados a lugares seguros durante el paso de "Ike".

La cifra fue suministrada por el coronel José Ernesto Betancourt, del Estado Mayor de la Defensa Civil, quien precisó que el 79 por ciento de los evacuados se trasladó a casas de familiares o vecinos y el resto a albergues estatales.

La destrucción de viviendas se debe, en buena parte, a la precariedad de los hogares cubanos, muchos construidos con unas pocas tablas y tejas de cemento, como mostraron las imágenes de las agencias y televisiones internacionales.

Los hoteles para turistas, más sólidos, mejor construidos, apenas tuvieron averías ligeras, según declaraciones del jefe de Defensa del Ministerio del Turismo, Carlos de los Cuetos, difundidas por medios oficiales.

Solo el 5 por ciento de los turistas tuvieron que ser trasladados, agregó.

Sobre los daños agrícolas, desde la provincia oriental de Santiago de Cuba medios oficiales informaron del peligro que corre la cosecha de café por la falta de personal para la recolección.

"Los vientos y lluvias del huracán 'Ike' provocaron la caída de algunos volúmenes del grano y su consiguiente pérdida, pero sobre todo impidieron la entrada de unos ocho mil alumnos de las enseñanzas media y media superior que tenían la misión de iniciar la recogida", explicó la agencia estatal AIN.

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