El Rey, en el homenaje a los héroes del Dos de Mayo en el Alcázar de Segovia

El Rey ha presidido esta mañana en el Alcázar de Segovia el homenaje a los héroes del Dos de Mayo, Daoiz y Velarde, y la entrega del Premio que lleva el nombre del primero de ellos al teniente general de la Academia de Artillería, Víctor Rodríguez Cerdido.

El luto oficial por la muerte el pasado sábado del ex presidente del Gobierno Leopoldo Calvo Sotelo, ha marcado la ceremonia en la que no ha sonado el Himno nacional ni se han rendido honores a Don Juan Carlos.

Sin embargo, en el momento de la ofrenda floral a los héroes de la independencia y a los de los ejércitos de todos los tiempos, la banda de música ha entonado con gran solemnidad "La muerte no es el final" y ha interpretado el "Toque de silencio".

El Rey ha sido recibido a su llegada a la histórica fortaleza por el Jefe del Estado Mayor de la Defensa, Félix Sanz; el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera; el delegado del Gobierno, Miguel Alejo; el alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, y el director de la Academia, general Ricardo Sotomayor.

Don Juan Carlos ha saludado a las autoridades y después ha seguido la ceremonia desde un lugar preferente frente al monumento a Daoiz y Velarde -obra de Aniceto Marinas- en la plaza de la Reina Victoria Eugenia, frente al Alcázar.

Una escuadra de gastadores ha rodeado el monumento y ha dado comienzo el acto, en el que el capitán más antiguo, Alejandro Herrero, ha leído la lección del 2 de mayo, en la que ha recordado a los dos héroes, ha relatado los antecedentes históricos de aquella destacada fecha y ha contado lo acaecido en aquella decisiva jornada.

Don Juan Carlos ha entregado al teniente general Rodríguez Cerdido el sable símbolo del Premio Daoiz- que instituyeron hace cien años los descendientes de uno de los protagonistas del levantamiento- correspondiente al quinquenio 2003-2008.

El premiado, que fue profesor, jefe de estudios y director de la Academia ha recordado a quienes le precedieron en este galardón, el general de división Alejandro Vázquez en el quinquenio 1993-1998 y el general del ejército Alfonso Pardo de Santallana en el de 1998. 2003.

Una vez entregada la distinción se ha procedido a la tradicional ofrenda floral y se han oído unas salvas de honor de fusilería, aunque estaba previsto que por primera vez desde 1521, cuando la Guerra de las Comunidades, se disparasen los cañones instalados en el Alcázar, que mostraba, en señal de luto, las banderas a media asta.

Antes de abandonar el recinto, Don Juan Carlos ha saludado a los asistentes, pero se ha suspendido el vino español tradicional en estos actos.

Además de los alumnos de las distintas secciones de la Academia de Artillería, la ceremonia ha contado con la presencia de un Regimiento de Caballería Farnesio XII, de Cabezón del Pisuerga (Valladolid); otro de Infantería Soria 9, con sede en Lanzarote, y un tercero de Ingenieros, con base en Ceuta.

La presencia del Rey en este homenaje y en la entrega del Premio- que se falla cada cinco años- ha rememorado el bicentenario del Dos de mayo y también cuando su abuelo, el Rey Alfonso XIII, estuvo aquí hace cien años para rendir tributo a los españoles que se enfrentaron a la ocupación francesa.

Precisamente el 6 de mayo de 1808 Alfonso XIII dio a conocer en Segovia que el Alcázar era devuelto al Cuerpo de Artillería una vez restaurado tras el incendio de 1862, si bien la Academia del cuerpo se encuentra ahora en el antiguo convento de San Francisco.