Hoy no es un día normal en el plató de La ruleta de la suerte, el concurso que cada mediodía desde hace ahora cuatro años reparte suerte y sonrisas en Antena 3. Tanto el público como los presentadores, Jorge Fernández y su compañera Paloma López, lucen un curioso atuendo. Estamos en El Rocío, y los responsables del formato líder de esta franja horaria quieren que se note; eso sí, muy a pesar del sufrido presentador, a quien las apreturas del traje de rociero no dejan tranquilo hasta que, gracias a los sastres, consigue el alivio que necesita para conducir el programa como siempre, aunque hoy las dos hermandades y el coro que vienen de público den una sensación de fiesta que traspasa la pantalla.

El jolgorio está justificado, al menos para los responsables del formato. En estos tiempos de estrenos que desaparecen antes de que al audiencia llegue incluso a conocerlos, la ruleta de Antena 3 sigue girando sin problemas, y eso que hace apenas un mes, el pasado 18 de abril, cumplió su cuarto aniversario, todo un logro para un concurso que es tributario de aquel que, con un título muy parecido, presentara Mayra Gómez Kemp allá por 1990. 'Yo no pensaba para nada que iba a durar tanto, ni tampoco la cadena o la productora' [Martingala], explica el presentador del programa, Jorge Fernández.

'Nos preocupamos mucho de la gente, de conservar a nuestros fieles'

Pero el caso es que, tras más de un millar de ediciones, el concurso, que se emite a las 12.30 horas, mantiene una audiencia media de 1.221.000 espectadores y una cuota de pantalla del 24,3%, si bien es cierto que el share se ha resentido un poco en la presente temporada, cayendo hasta el 20,8%. ¿Pero cuáles son las claves de la longevidad del veterano concurso? 'En primer lugarseñala Fernández mientras se prepara para el programa de hoy está el hecho de hacer una tele distinta a la que la gente estaba acostumbrada en esta franja; la hora está muy acertada y el concurso puede cogerse en cualquier momento; además va dirigido también al público infantil'. Pero falta lo más importante: 'Nos preocupamos mucho de la gente, de conservar a nuestros fieles para que sigan estando ahí', agrega.

Otros factores, como la cuantía de los regalos, parecen secundarios. 'Le hemos dado muchas vueltas y hemos llegado a la conclusión de que porque haya premios más gordos no va a verse más o menos, ya que al público lo que le gusta es el mecanismo del concurso', agrega Fernández, que recuerda el mayor premio de la historia del formato: 8.000 euros y el coche. Eso sí, tal como resalta este presentador, ex modelo y ex jugador de élite de baloncesto (llegó a disputar partidos en la ACB con el Tau), la clave está en la diversión del público y de los concursantes. 'Todos salen encantados', admite con orgullo.

Entretanto, el animador del programa, Carlos Vázquez, ha calentado al ya de por sí bullanguero público de hoy; la grabación va a empezar. '¡Hay que berrear las canciones, caña, que me sangren los oídos!', azuza al público, en este caso de edad madura. 'Es más complicado con niños, pero al menos no te discuten nada', añade Vázquez, que se las ve y se las desea con los rocieros mientras la ruleta sigue girando.