Salgado afirma que ya no hay nuevas reformas pendientes tras la laboral

La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía, Elena Salgado, dijo hoy que el Gobierno ha planteado ya todas las reformas que tenía previstas, la última, la del mercado laboral, aprobada ayer mismo, por lo que no hay ninguna pendiente.

En una entrevista en Telecinco, Salgado explicó que, a parte de la del mercado laboral, "la del sistema financiero terminará este mes" y la de las pensiones "se está discutiendo en el Pacto de Toledo", por lo que ya están en marcha todas las reformas que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció el pasado diciembre cuando reveló su estrategia de economía sostenida.

Y la anunciada subida de impuestos a las rentas altas, dijo, la plantearemos "en el momento oportuno", que será cuando se presente la ley de presupuestos, porque será entonces cuando se le dirá a los españoles "de dónde vamos a obtener los fondos y a qué los vamos a dedicar".

Sobre la reforma laboral, Salgado destacó que afecta sólo a los nuevos contratos, por lo que no supondrá "sacrificios" para quienes ya tienen empleo, y puso como ejemplo que "quien tiene un contrato con derecho a 45 días de indemnización" seguirá manteniendo esos derechos en caso de despido improcedente.

Preguntada por si las reformas serán suficientes para recuperar la confianza de los mercados, Salgado recordó que el Banco de España va a publicar los resultados de los test de esfuerzo ("stress test") que se le hicieron a la banca por mandato de Bruselas "y será entonces cuando los mercados comprobarán que nuestro sector financiero es sólido entidad por entidad".

Asimismo, aseguró que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) será "más que suficiente" para cubrir todas las necesidades del sistema financiero español, y aventuró que se utilizará "menos de un tercio" de los 99.000 millones de euros que suma la capacidad de endeudamiento del fondo.

Los mercados "van a recuperar la confianza en nosotros", añadió Salgado, quien admitió -"como ya hizo Zapatero", dijo- que "es posible que hayamos tardado en reconocer la profundidad de la crisis", porque su origen fue el sector financiero y como el español es "tan sólido" nunca pensamos que los efectos en España iban a ser tan graves.

Lo que ocurre es que incidió en la base de la economía, que fue el crecimiento "desmesurado" del sector inmobiliario, afirmó y agregó que es verdad que la crisis "nos está afectando con retraso, pero nos está afectando mucho", por lo que ahora hay que recuperar la confianza y una forma de hacerlo es negando los rumores, como hizo ayer el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Sobre la creación de una tasa a la banca, Salgado aseguró que España está a favor de que los bancos tengan que pagar un impuesto para alimentar un fondo que pueda servir para que "cuando haya otra crisis, los Estados no tengan que pagarla".