Juan Antonio Samaranch, ex presidente del COI ingresado hoy en el Hospital Clínico de Madrid, aquejado de una patología cardiovascular, mantiene una agenda cargada de viajes intercontinentales y de actos públicos que, según su familia, podría estar en el origen de esta crisis.

Samaranch, que abandonó la presidencia del COI en 2001 tras 21 años en el cargo, disminuyó sólo de manera relativa su actividad, pues mantiene varios puestos que le obligan a viajar prácticamente todas las semanas.

La presidencia honorífica del Comité Olímpico Internacional, la del Foro Hispano-Chino y la de la Fundación del Museo Olímpico de Lausana son los cargos que más tiempo le ocupan y que le llevan a volar a menudo desde Barcelona y Madrid hasta Ginebra o Pekín.

"Esto es lo que pasa cuando se lleva una vida de 40 años y se tienen 87", dijo a EFE su hijo, Juan Antonio Samaranch Salisachs, mientras se dirigía al lugar del incidente ocurrido hoy.

La influencia que mantiene en los círculos olímpicos hace, además, que la presencia y el asesoramiento de Samaranch sean requeridos en numeroso foros. Asiste a prácticamente todos los actos que tienen que ver con la candidatura olímpica madrileña, así como a los de la cátedra que lleva su nombre en la Universidad Camilo José Cela de Madrid.

El pasado verano estuvo en Guatemala en una Sesión del COI y en los Juegos Panamericanos de Rio de Janeiro, y con posterioridad ha viajado a China, ha presidido en Oviedo el jurado de los premios Príncipe de Asturias y ha asistido a la Conferencia de la Agencia Mundial Antidopaje en Madrid, por citar algunas de sus últimas comparecencias.

A Samaranch se le vio ayer en Barcelona en un acto de promoción del libro "Cartas a un joven español", escrito por José María Aznar. El ex presidente del Gobierno firmó ejemplares a unas 300 personas, entre ellas a Samaranch.

El dirigente deportivo sufrió su crisis de salud más conocida en el verano de 2001, fruto del intenso trabajo y de las emociones que vivió en la Sesión del COI celebrada en Moscú, la de su despedida. Allí se eligió Pekín como sede de los Juegos de 2008 y se designó a Jacques Rogge para suceder al español.

Samaranch fue ingresado en julio de ese año en el Centro Hospitalario Universitario de Lausana a causa de una "fatiga extrema", sólo 24 horas después de haber entregado la presidencia del COI al cirujano belga.