Este artículo se publicó hace 13 años.
La segunda fase de los comicios egipcios arranca con pocos incidentes y menos votantes
La segunda fase de las elecciones parlamentarias egipcias comenzó hoy en una jornada que transcurrió con menos irregularidades y votantes que la primera ronda de estos comicios legislativos, que se prolongarán hasta marzo de 2012.
En esta ocasión, más de dieciocho millones de personas están llamadas a votar en nueve provincias del país, en un momento en que la atención está centrada en la mayoría que obtuvieron hace dos semanas las formaciones islamistas de la mano del Partido Libertad y Justicia, de los Hermanos Musulmanes, y de los salafistas de Al Nur.
La jornada electoral estuvo también marcada por la ausencia de algunas irregularidades que ocurrieron durante la primera etapa, como la llegada con retraso de los jueces y las papeletas o la distribución de propaganda ante los centros de votación.
Aun así, los carteles de los candidatos seguían presidiendo las entradas de los colegios y el jefe de la Comisión Electoral, Abdelmoaiz Ibrahim, destacó en una rueda de prensa la necesidad de luchar contra la propaganda electoral durante el periodo de reflexión, que en Egipto es de dos días.
Asimismo, Ibrahim informó de que el Tribunal Supremo Administrativo ordenó el lunes el retraso de los comicios en tres distritos de las provincias de Menufiya y Al Bahira, en el delta del Nilo, y de Sohag (sur) porque algunas formaciones no estaban presentes en las papeletas electorales.
Después de que durante la primera etapa, que se celebró los pasados 28 y 29 de noviembre, los medios locales mostraran imágenes de los ciudadanos haciendo cola durante horas, hoy muchos egipcios optaron por esperar a mañana o acudir a votar equipados con taburetes plegables.
"Esta mañana, una hora antes de abrir el colegio, ya había gente haciendo cola y algunos cuando lo han visto se han marchado y han dicho que volverán mañana", explicó a Efe el juez de la escuela Qaumiya Aguza, Ahmed Izat.
En esta escuela de Aguza, un barrio de clase media de la provincia de Guiza, Tareq Mohai el Din esperaba pacientemente su turno para votar y, como muchos a su alrededor, expresaba su preferencia por el Partido Libertad y Justicia, la formación de los Hermanos Musulmanes que obtuvo el 37 % de los sufragios en la primera fase.
"Lo que este país necesita es algo nuevo y el Partido Libertad y Justicia lleva treinta años queriendo gobernar, son los mejores y se merecen una oportunidad", aseguró este joven médico.
En el barrio popular de Imbaba, donde los islamistas gozan de gran popularidad, decenas de mujeres se aglomeraban ante la entrada del colegio Gazuit Tabuq y les gritaban a los soldados que, parapetados tras unos bancos de madera, intentaban contener a la multitud con gestos tranquilizadores y la ayuda de un megáfono.
En el interior, varias mujeres declararon a Efe su intención de votar al Partido Libertad y Justicia, aunque una de ellas, Afif Hashim, mostró un papel en el que había dibujado el símbolo del liberal Bloque Egipcio.
"Me lo ha escrito mi marido", contó esta ama de casa, que, ante el hecho de que el partido al que quería votar no era el mismo que el que tenía apuntado en el papel, aseguró que "en estos momentos hay cosas más importantes, como el precio de las bombonas de gas".
"El gas es ahora el principal problema de Imbaba, los 'baltagueya' (matones) secuestran los camiones de gas subvencionados por el Gobierno y los revenden a cuarenta o cincuenta libras", lamentó Hashim, que agregó que una bombona subvencionada cuesta diez veces menos.
En cambio, en el barrio de clase media de Dokki, la mayoría islamista sí preocupaba a Hasan Abdalá, que votó al Bloque Egipcio porque "si se repiten los resultados de la primera fase, el Parlamento no estará equilibrado, y debe estarlo en esta primera legislatura".
"Quizás en las próximas elecciones parlamentarias me sentiré más inclinado a votar a mi partido favorito, pero ahora creo no es bueno que haya mayorías, porque esta es la primera vez que votamos y no conocemos a nuestros políticos", manifestó Abdalá, que subrayó que serán ellos los encargados de redactar la nueva Constitución.
En esta segunda etapa de las elecciones a la Cámara Baja están en juego 180 escaños, que se elegirán entre hoy y mañana, aunque los próximos días 21 y 22 de diciembre se celebrará una segunda vuelta para escoger a los candidatos individuales que no hayan conseguido una mayoría absoluta.
Laura Millan Lombraña
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.