La coincidencia de las Fallas con la Semana Santa ha influido en los colores elegidos este año para formar el manto de la virgen de los Desamparados durante la ofrenda a la patrona de Valencia que realizarán las falleras y falleros, en la que depositarán unas 200 canastillas y 28.000 ramos de claveles y estátice, una flor especial elegida para esta ocasión.

Según estimaciones de la Junta Central Fallera, alrededor de cien mil personas, entre niños, adultos y músicos, se espera que este año participen en los dos días dedicados a la ofrenda de flores, el acto más multitudinario de las fiestas de las fallas, de los cuales entre 45.000 y 50.000 desfilaran esta tarde en la primera de las jornadas, que se estima que concluirá pasada la una de la madrugada.

El solapamiento con la Semana Santa ha motivado que los "vestidores de la Virgen" (los encargados de diseñar e ir elaborando el manto floral) hayan elegido el color morado, azul y amarillo para conformar el motivo central del manto de la "Geperudeta" (como cariñosamente llaman los valencianos a la virgen de los Desamparados), que este año está relacionado con la Semana Santa Marinera, la tradicional y peculiar fiesta religiosa del distrito Marítimo de la capital valenciana.

La fuerte demanda de clavel existente estos días por parte de las cofradías y hermandades de Semana Santa para adornar las andas y los tronos de los pasos procesionales ha hecho que, ante una posible escasez de oferta, se optara por la estátice, una flor similar, que además se presenta en colores azul y morado, que son los característicos de la Semana Santa, y que complementarán los habituales claveles en sus tonalidades de rojo, blanco y rosa.

De las 385 comisiones que participan en la ofrenda, 30 llevaran flor estátice (en los colores azul, morado y amarillo), 118 llevarán claveles rojos, otras 119 claveles blancos y las 118 restantes claveles rosas.

Los ramos de flores se van depositando en una estructura piramidal de madera calada, y en cuya parte superior se ha colocado el rostro de la Virgen de los Desamparados y el Niño Jesús en brazos.

Un total de 40 personas integran el grupo de vestidores de la Virgen que se encargan, durante las ocho o nueve horas que dura el desfile en cada uno de los dos días, de recoger, preparar, lanzar y colocar los ramos en la estructura correspondiente.

La primera jornada de la ofrenda de flores a la Virgen de los Desamparados ha comenzado a las 16.00 horas siguiendo dos itinerarios, uno por desde la Glorieta y la calle de la Paz, y un segundo desde la plaza de San Agustín y la calle San Vicente, confluyendo ambos en la plaza de la Virgen, junto a la catedral y la basílica.

Las primeras comisiones en desfilar han sido las de los sectores de Pla del Remei-Gran Vía y Benimàmet-Burjassot-Beniferri, que lo hicieron por el primero de los itinerarios, y Benicalap y Campanar, por el segundo.

La hija de los Duques de Lugo, Victoria Federica, ha desfilado con una de estas comisiones, la de Grabador Esteve-Cirilo Amorós, y su paso por la Plaza de la Virgen ha sido contemplado por su padre, Jaime de Marichalar, y su hermano, Felipe Juan Froilán.

Durante el trayecto, cada comisión va acompañada de una banda de música, y entre las falleras participantes de hoy se ha podido contemplar hasta tres generaciones de mujeres de una misma familia (abuela, madre e hijas, alguna de ellas en cochecito de bebé), que no han podido reprimir las lágrimas cuando han depositado su ramo ante la "Geperudeta".

En los últimos años, también es habitual ver desfilar a mujeres inmigrantes de nacionalidad china o de diferentes países sudamericanos, que se han incorporado a la fiesta y participan plenamente en todos los actos.

La participación de hoy se cerrará, a últimas horas de la madrugada, con la intervención de la Fallera Mayor Infantil de Valencia, Victoria Blázquez Cercós.