Público
Público

Semillas foráneas, una gran amenaza para el ecosistema antártico

Reuters

Por Pauline Askin

Los científicos temen una invasiónalienígena en el impoluto continente helado de la Antártida,aunque no desde el espacio exterior sino por el contenido de losbolsillos y bolsas de la gente que lo visita.

Las semillas y plantas traídas accidentalmente a laAntártida por turistas y científicos podrían introducir especiesde plantas foráneas que podrían amenazar la supervivencia de laflora autóctona en el delicado ecosistema.

Las plantas invasoras están entre las amenazas mássignificativas para la conservación de la Antártida, sobre todoen un momento en el que el cambio climático está calentando elcontinente helado, según un informe publicado el martes en elProceedings of the National Academy of Sciences Journal.

Más de 33.000 turistas y 7.000 científicos visitan laAntártida cada año en barco y avión, y una encuesta a lospasajeros durante dos meses halló que muchos de ellos llevansemillas recogidas de otros países que han visitado previamente.

El estudio rastreó sus bolsillos, pantalones, zapatos yequipaje y utilizó pinzas para extraer semillas ocultasaccidentalmente. En promedio, cada persona examinada tenía 9,5semillas entre la ropa y las maletas.

"Las personas que más tenían portaban gran una cantidad desemillas. Realmente ellos eran la amenaza más importante",afirmó Dana Bergstrom, de la División Antártica Australiana.

Entre las especies externas encontradas estaban la amapolade Islandia y la gramínea 'festuca arundinacea', todasprocedentes de climas fríos y capaces de crecer en la Antártida.

La península Antártida, donde viaja la mayoría de losturistas, es ahora considerada un "punto caliente" en elcongelado continente y el cálido clima hace más fácil lapropagación de las semillas.

"La península se está calentado a una de las tasas más altasdel planeta", señaló Bergstrom.

El estudio, la primera evaluación de las especies invasorasen la Antártida, encuestó a unos 1.000 pasajeros durante el 2007y el 2008, primer año del Año Polar Internacional, un acuerdointernacional para investigar las regiones polares.

Los expertos han tardado casi tres años en identificar lasespecies de las semillas y sus efectos sobre el continentehelado.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias