El vicepresidente segundo, Pedro Solbes, lamentó hoy la "contradicción" que existe en la legislación comunitaria sobre energía, que permite a los países aducir razones de estrategia nacional para poner condiciones a una operación en el sector, pero en la práctica la Comisión Europea no las acepta.

Solbes hizo hoy estas consideraciones en un acto con empresarios tras conocer que el Tribunal de Justicia de la UE sentenció hoy que España infringió el Derecho comunitario al no retirar las condiciones impuestas a E.ON para la adquisición de Endesa, y condenó al Gobierno español a pagar las costas del proceso.

Recordó que la legislación comunitaria reconoce razones de tipo "estratégico nacional" por las que un país puede tomar "medidas nacionales", y poner condiciones a una operación en el sector.

Sin embargo, lamentó, "en la práctica la interpretación de la Comisión Europea" sobre la legislación hace que esas razones "no existan".

El titular de Economía advirtió de que se trata de una sentencia muy importante no sólo para España, sino también para el resto de países de la Unión Europea, porque interpreta si hay margen nacional de maniobra. Y si dicho margen "no existe para España, no existe para nadie", advirtió.

En su opinión, esto abrirá un debate "muy importante" sobre el futuro de la política energética europea.

El vicepresidente, que conoció esta sentencia al ser preguntado en su encuentro con empresarios madrileños, reconoció que no le gusta la condena, pero insistió en que las condiciones que España puso eran "razonables", y entre ellas recordó la que afectaba al suministro en las islas -no vender activos fuera de la Península en cinco años-.

Además, el vicepresidente se preguntó si, dado que "no hay libre circulación de energía" en Europa, qué pasaría en una "situación de crisis", si no hubiese capacidad nacional de reacción quién garantizaría el suministro.