Soldados amotinados en Guinea Bissau atacaron durante la madrugada del domingo la residencia del presidente, Joao Bernardo 'Niño' Vieira, apenas un día después de que fueran anunciados los resultados de las elecciones parlamentarias, dijeron testigos.

Sin embargo, después de un tiroteo que duró varias horas en los alrededores de la casa de Vieira en el distrito de Ichon de Pepel de la capital, el intento por derrocar o matar al presidente parecía haber fracasado, afirmaron testigos. Al menos dos personas murieron en el enfrentamiento.

La capital Bissau parecía tranquila el domingo.

La Unión Africana expresó su preocupación por los incidentes de violencia, que se produjeron tras el anuncio el viernes de que el ex partido gobernante de Guinea Bissau PAIGC había ganado una clara mayoría parlamentaria en las elecciones celebradas en la ex colonia portuguesa el 16 de noviembre.

El presidente de Senegal, Abdoulaye Wade, explicó que había recibido una llamada telefónica durante la noche por parte de Vieira diciendo que unos soldados habían iniciado un tiroteo frente a su casa. 'Me dijo que los soldados estaban disparando contra su casa', declaró Wade a Radio Francia Internacional.

Wade dijo que envió tropas senegalesas a la frontera con Guinea Bissau y que había preparado un avión para evacuar a Vieira y su familia, aunque éste se negaba a dejar su país.

El presidente senegalés apeló a las tropas amotinadas de Guinea Bissau a volver a sus cuarteles.

El viernes, la comisión electoral guineana anunció que el Partido Africano para la Independencia de Guinea Bissau y Cabo Verde (PAIGC) había logrado 67 del total de 100 escaños en el Parlamento.

No obstante, el líder de la oposición Koumba Yala, un ex presidente derrocado en un golpe de 2003 que ha acusado a Vieira de estar implicado en narcotráfico, consideró que los resultados eran fraudulentos.

Yala encabeza el Partido de Renovación Social (PRS), que cuenta con el apoyo del grupo étnico Balante y de jefes militares. La facción logró 28 escaños en las elecciones, convirtiéndose en el segundo movimiento político después del PAIGC.