El Tata Nano, el vehículo del fabricante indio destinado a subir los índices de motorización de los países subdesarrolados, por su precio desde los 1.700 euros, vendrá a España, pero no a una tarifa inferior a los 4.000 euros.

Según declaró hoy a EFE durante la primera jornada de prensa del Salón del Automóvil de Ginebra Eduardo Divar, director general de Tata España, "todo lo que se sitúe por debajo de esa tarifa es inviable".

De este modelo de la marca india Tata se descarta definitivamente la posibilidad de comercializarlo en España como un cuadriciclo (vehículo de potencia limitada que no precisa de carné de conducir).

Las versiones que se comercialicen del Nano en Europa tendrán que contar con elementos cualitativos y de seguridad, como las barras laterales y frontales que superen las normas de homologación del continente.

Todos estos cambios encarecerán sensiblemente el precio de venta al público de este coche del fabricante indio que, en principio, en España, se dirigirá a un público urbanita, como segundo o tercer coche familiar, y también a un usuario del medio rural que desee dar el salto desde el actual cuadriciclo.

Tata se ha puesto objetivos muy ambiciosos en España, aunque según Divar, todo dependerá del desarrollo de producto que planifiquen los responsables de la firma india.

Entre los objetivos de Tata para el mercado español figuran vender 4.300 unidades este año, por las 2.800 del año pasado, y elevar el registro en 2009, hasta las 6.000, aunque Divar se mostró cauto ante el comportamiento del mercado global del automóvil en España en este próximo bienio.

Para afrontar el reto, el producto ofrecido por Tata se ha incrementado este año con las versiones de 140 CV del Xenon y del Safari.

El año que viene está previsto iniciar la venta de dos berlinas como el Indica y el Indigo, equipadas ambas con motores gasolina (1.4 litros) y diesel (1.2 litros) de la firma italiana Fiat.