El Tesoro ha adjudicado este martes 3.256 millones de euros en letras a tres y seis meses, subiendo casi un punto el interés de ambas denominaciones, hasta el 1,870% el de las primeras y hasta el 2,260% el de las segundas, según los datos del Banco de España, que ha actuado de agente.

Para el secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, los resultados confirman que 'no hay duda sobre la solvencia' de España porque ha habido demanda que superaba 'en mucho' a la oferta.

En la anterior subasta de estas denominaciones, que tuvo lugar el pasado 26 de octubre, el Tesoro adjudicó 74 millones de euros menos, 3.182 millones, con intereses marginales del 0,974% para las letras a tres meses y del 1,298% para las de seis.

En la subasta anterior se adjudicaron 74 millones menos

En esta cita, que se produce en plena crisis de deuda por el rescate a Irlanda, la caída del Gobierno de ese país y el temor que sigue recorriendo los mercados por el miedo al contagio a Portugal y España, el objetivo de emisión oscilaba entre 3.000 y 4.000 millones de euros, con lo que se ha cubierto, aunque no muy holgadamente.

Los inversores solicitaron 4.896 millones en letras a tres meses, de los que les fueron adjudicados menos de la mitad, 2.091 millones, y 3.080 millones en letras a seis meses, aunque sólo obtuvieron 1.164 millones.

'La prima lleva muchos días en una situación que no es normal y esperamos que vuelva a una situación más normal, en la medida en que se acaben todas las dudas sobre Irlanda', ha señalado Ocaña.

El responsable de Hacienda y Presupuestosha advertido , no obstante, que no hay que mirar una subasta en un día concreto. 'Hay que mirar la serie larga y estamos financiándonos sin ningún problema', sentenció.

La subasta ha sido la última de noviembre, un mes en el que se han adjudicado en total 15.270 millones de euros en bonos, letras y obligaciones y el Estado se ha visto obligado a elevar el interés en todas las ocasiones.

Más de 15.000 millones fueron adjudicados en noviembre

El resultado de la subasta parecía relajar muy ligeramente las tensiones en el mercado, al menos en lo relativo a la prima de riesgo española, que caía un punto básico, hasta 214, tras conocerse los datos del Tesoro, después de abrir al alza y seguir por ese camino poco más de hora y media después de iniciada la sesión. La prima de riesgo portuguesa se estrechaba también, en este caso tres puntos básicos, hasta los 401.

Por el contrario, el diferencial entre el bono griego a diez años y el alemán se anotaba otros tres puntos básicos y alcanzaba los 914, lo mismo que ocurría con la prima de riesgo irlandesa, que se ensanchaba en otros cinco puntos básicos, hasta los 536, a la espera de que se conozcan los detalles sobre su rescate.

Los mercados siguen con preocupación las negociaciones del Gobierno irlandés con la Unión Europea y el Fondo Monetario Internaional para fijar las condiciones del rescate financiero de este país, con la urgencia añadida de ratificar el proceso presupuestario para convocar después elecciones generales.