Trapattoni vuelve a Italia como seleccionador irlandés

El seleccionador de Irlanda, Giovanni Trapattoni, podría verse tentado a volver al fútbol defensivo por el que es conocido cuando el miércoles regrese a su tierra para enfrentarse a Italia en un partido clasificatorio para el Mundial de Sudáfrica de 2010.

Su reputación en favor del 'catenaccio' se cimentó en su periodo al frente de los 'azurri', uno de los pocos fracasos de una larga y exitosa carrera, cuando los malos resultados en el Mundial de 2002 y en la Eurocopa de 2004 se atribuyeron a sus tácticas defensivas.

Pero Trapattoni negó las acusaciones en unas declaraciones previas al encuentro del Grupo 8 que se disputará en Bari.

"Podéis ver los goles que han marcado mis equipos y los que han concedido y sacar las conclusiones vosotros mismos", dijo en la televisión de la RAI.

"Si tu equipo marca más goles que los demás y recibe menos, entonces debe ser algo de valor, no?", preguntó el técnico, que cumplió 70 años el 17 de marzo, día de San Patricio, fiesta nacional en Irlanda.

Pero es poco probable que el miércoles despliegue mucho fútbol de ataque ante los campeones del mundo, sobre todo después del decepcionante 1-1 del sábado en Dublín con Bulgaria.

Italia, por su parte, aprovechó para sacar una ventaja de dos puntos al frente del grupo al batir a Montenegro 2-0 en el país balcánico.

Lo que puede preocupar a Trapattoni más que el resultado y la clasificación en el grupo es la falta de ambición y de creatividad que mostraron sus jugadores.

Se espera que Irlanda apueste por un empate que le consolide en la segunda plaza del grupo, con siete puntos de diferencia sobre los búlgaros, que ocupan la tercera plaza.

El seleccionador italiano, Marcello Lippi, se ha mostrado cauto.

"Irlanda no debería ser juzgada por el empate con Bulgaria sino por las cosas buenas que han logrado hasta ahora en los clasificatorios para el Mundial", declaró a la prensa.

"Si conozco a Trapattoni, será capaz de crear el nivel adecuado de tensión y hacer todo lo posible para gastarnos una broma pesada".

La victoria en Montenegro costó a los italianos la lesión del delantero Antonio Di Natale, que permanecerá un largo periodo sin jugar.