"U23D", la primera película sobre el grupo irlandés liderado por "Bono" que se rueda en tres dimensiones, se estrenará en España el próximo 3 de octubre. Sus seguidores podrán revivir la gira de "Vértigo" sin moverse de la butaca, pero más cerca que nunca del escenario.

Este filme, que firman Catherine Owens y Mark Pellington, ha sido presentado hoy en el Festival de Cine de San Sebastián en el marco del VII Encuentro Internacional de Escuelas de Cine.

Está rodado con la más innovadora tecnología digital 3D y el mejor sonido "multi-canal sorround" y sólo se proyectará en cines preparados para ello, ya que se ha decidido no comercializarlo en DVD ni emitirlo por plataformas de televisión.

Con fragmentos de los conciertos que U2 ofreció en el final de su gira en Ciudad de México, Sao Paulo, Santiago de Chile y Buenos Aires, se ha construido este concierto, que lleva al espectador virtualmente al césped del estadio y le hace sentir la proximidad de los artistas, incluso el roce de la mano de "Bono", como en la interpretación de "Sunday Bloody Sunday".

Catherina Owens se encuentra en San Sebastián y ha explicado a un grupo de periodistas que la elección de grabar en Sudamérica fue del líder de U2, que veía en el público de aquellos países mayor homogeneidad que en el de los europeos, además de una mayor afinidad con el carácter irlandés.

Además, U2 llevaba ocho años sin aparecer por esos lugares y presuponían una descarga de mayor emoción y energía al recibirlos después de tantos años, como efectivamente sucedió.

Los 85 minutos de película son el resultado de una "torturante" selección de 100 horas de filmación, entre ellas, varias de un pequeño concierto que hicieron sin público porque necesitaban planos cortos y "Bono" no deseaba que las cámaras interfirieran con la gente.

Esos planos se montaron luego con otros, de modo que el efecto final es el de un sólo concierto de la gira, que termina con "Yahweh", con los títulos de crédito ya sobre la pantalla.

Owens, directora de contenidos visuales de U2 desde hace más de quince años, ha explicado que el filme costó 15 millones de dólares y que, aunque es caro, no lo es tanto como otros filmes de 3D. "Si lo hubiésemos rodado hoy habríamos gastado 10 millones".

Ha asegurado que el grupo está "muy emocionado" con la experiencia y esperan que tenga buena acogida.

"Es el camino ideal de acceso para la gente de países que por razones políticas o económicas no puede acudir a ningún concierto. Además, por el momento tampoco se puede piratear el 3D", ha destacado Owens, amiga de los componentes de U2 desde los 18 años, cuando tocaba el bajo en una banda de chicas, aunque más aficionada al "reggae" que a la música de sus compatriotas.