Un muñeco que representa al presidente francés Nicolas Sarkozy y un "manual de vudú" adjunto con instrucciones para clavarle alfileres puede continuar a la venta tras la decisión adoptada el viernes por un tribunal de apelaciones.

El muñeco, que está a la venta desde el 9 de octubre, está adornado con algunas de las frases más conocidas de Sarkozy, como su famoso insulto a un hombre que no le quiso estrechar la mano en un acto rural el año pasado: "Piérdete, patético gilipollas". También trae alfileres y un manual de instrucciones sobre cómo clavárselos al muñeco.

El tribunal dijo que el muñeco que acompaña al título "Nicolas Sarkozy, el manual de vudú", constituye una "ofensa contra la dignidad personal", de Sarkozy.

Pero dijo que sería "desproporcionado y perjudicial para la libertad de expresión" prohibir su venta directamente.

En su lugar, el tribunal determinó que el muñeco debería venderse con una nota de advertencia.

También ordenó a los fabricantes pagar a Sarkozy 2.000 euros por los costes, el resto de costas procesales y un simbólico euro en daños.

El abogado del presidente francés, Thierry Herzog, dijo que estaba satisfecho con la decisión: "Lo importante es que se apliquen principios consistentes y jurisprudencia".

Un tribunal de menor rango rechazó la petición de Sarkozy para prohibir la venta del muñeco y el manual, indicando que estos objetos estaban "dentro de los límites autorizados de la libertad de expresión y el derecho al humor".

El vudú es una religión que se practica en algunas zonas del Caribe y el sur de Estados Unidos.

Según una creencia bastante extendida, los practicantes del vudú pueden clavar agujas en muñecos que representan a sus enemigos para echarles maldiciones desde lejos. Sin embargo, los expertos en vudú dicen que la práctica ha sido muy malinterpretada y distorsionada por los intrusos.