Ni eurobonos, ni euro-avales. La canciller alemana, Angela Merkel, se opone también a demostrar un apoyo decidido al sistema bancario europeo a través de los avales conjuntos para que los bancos emitan deuda. Fuentes comunitarias consultadas por Público descartaron ayer que la opción esté todavía sobre la mesa de los ministros de Economía de la Unión Europea a pesar de la insistencia de la Comisión, España e Italia. 'Es seguro que el esquema será coordinado, pero no mutualizado', aseguraron.

Los problemas en una entidad bancaria de un país de la UE pueden afectar rápidamente a otro y por ese motivo ministros como Elena Salgado reclamaron en la última reunión de titulares de Economía que se exhibiesen avales conjuntos para que los bancos puedan emitir deuda a medio plazo para seguir financiándose. Así, la UE respaldaría los hasta 700.000 millones de euros de manera conjunta. El respaldo europeo sería sólo para una 'pequeña parte', siendo el resto responsabilidad de los gobiernos, según las mismas fuentes.

El BCE valoraponer en marcha un sistemade apoyo a dos años

Salgado reconoció a principios de noviembre que 'algunos países' ponen 'reparos' a lo que el comisario de Mercado Interior, Michel Barnier, describe como un 'enfoque europeo' que es 'esencial para romper el círculo vicioso entre bancos frágiles'. Entonces, Alemania, Reino Unido, Holanda o Suecia se opusieron a la petición. La semana pasada una reunión de expertos confirmó que la medida ha caído en desgracia.

En 2008, tras la caída de Lehman Brothers, los países de la UE decidieron poner en marcha un sistema de avales nacionales, de tal modo que cada país ha respondido por los suyos. 'A corto plazo, el BCE garantiza la liquidez de los bancos y a medio plazo son los fondos propios de las entidades, que pueden ser recapitalizadas', recordaron ayer fuentes diplomáticas. Sin embargo, 'a medio plazo hay un agujero' que ha de ser cubierto por garantías públicas.

Se quiere dar más papel en las ayudas a la Autoridad Bancaria Europea

Ante la indecisión de los 27, que no esperan llegar a un consenso el miércoles, el BCE considera la posibilidad de poner en marcha un sistema de apoyo a la banca para prestarle apoyo a dos o tres años vista. El movimiento del BCE, publicado el jueves, cuando la canciller alemana volvió a arremeter contra los eurobonos, es visto como una manera de compensar su oposición a los avales europeos, pero no ha sido anunciada oficialmente.

Los 27 estudian ahora cómo lograr ese 'enfoque europeo' que reclama Bruselas sin avalar las emisiones de bancos con sede en capitales extranjeras. La solución pasaría por implicar más a la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés), que podría supervisar los contactos entre las entidades bancarias que necesiten apoyo público para emitir deuda, y los reguladores nacionales. Si no hay acuerdo a nivel nacional, un debate en el seno de la UE podría decidir apoyar a la entidad en cuestión a través del fondo de rescate europeo, que puede recapitalizar (no avalar emisiones de deuda) a entidades bancarias.