Público
Público

La Unesco va a evaluar el impacto patrimonial de la torre Pelli en Sevilla

EFE

Una misión de la Unesco viajará "en los próximos días" a Sevilla para evaluar el impacto de la torre Pelli, actualmente en construcción, en la catalogación de la capital andaluza como ciudad Patrimonio de la Humanidad, indicaron hoy a Efe fuentes de la organización.

El grupo estará compuesto por dos técnicos del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios Histórico Artísticos (Icomos) y de otro de la Agencia de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), precisaron.

A través de una reunión con responsables del Ministerio de Cultura, del Ayuntamiento de Sevilla y de las asociaciones opuestas a la construcción de la torre Pelli para Cajasol, los expertos "determinarán si se han seguido las recomendaciones del Comité Mundial" del Patrimonio, indicó a Efe la directora del programa mundial de Patrimonio de Icomos, Regina Durighello.

A priori, en este organismo consultivo de la Unesco no se espera una respuesta positiva a esas recomendaciones, porque el Comité pidió a Sevilla en su reunión de junio pasado que parara las obras de construcción de la torre hasta que se evaluara el impacto que tienen sobre la consideración de la ciudad como Patrimonio de la Humanidad.

Pero el edificio sigue adquiriendo altura y ya se han completado 8 de las 42 plantas previstas, las que le situarían, con 178 metros de altura, como el más elevado de Sevilla, muy por encima de los 92 metros de la Giralda.

En principio, la misión de la Unesco tiene "un carácter constructivo", indica Durighello, que considera que "lo más importante es hacer recomendaciones para que este tipo de conflictos no se repitan en el futuro".

Pero los técnicos también tendrán que constatar que las obras avanzan, en contra de lo recomendado, por lo que así lo indicarán en su informe que será presentado antes de febrero al Comité del Patrimonio Mundial, que lo evaluará en su próxima reunión de verano.

No será la primera vez que Icomos ponga pegas a la construcción de la torre, ya que en un informe anterior ya aseguró que tenía un "impacto negativo" en el sitio protegido.

Y eso pese a que la torre de Cajasol está alejada del núcleo protegido, una superficie de 12 hectáreas en el centro de la ciudad que comprende la Catedral, el Alcázar y el Archivo de Indias.

"Pero incluso si está en la zona de amortiguamiento -de 187 hectáreas-, su presencia puede tener un impacto visual en el conjunto del bien", advierte Durighuello.

Será el Comité del Patrimonio Mundial quien tenga que determinar si ese impacto es suficiente para que Sevilla deje de integrar su lista de sitios protegidos.

Solo dos lugares han salido de la misma a lo largo de la historia, la ciudad alemana de Dresde, que lo hizo cuando en 2009 sus ciudadanos renunciaron a la construcción de un puente sobre el Elba, y el santuario de los óryx árabes de Omán, apartado en 2007 a petición del sultanato, deseoso de explotar el petróleo hallado en esa zona.

Pero antes de la salida, a Sevilla le quedan muchas opciones, como la inclusión de la ciudad en la lista de sitios en peligro.

La visita de la misión de la Unesco y de Icomos, que durará cuatro días, clarificará el futuro.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias