Una víctima delata en un vídeo antes de morir al acusado de quemarla viva

Horacio B.H., de 30 años, acusado de quemar viva a su esposa, Vanesa Rodríguez, rociándola con gasolina en una calle en Puertollano en julio de 2005, dijo hoy ante el tribunal que le juzga que no recuerda los hechos, aunque el testimonio de la víctima, recogido en un vídeo en el hospital meses antes de morir le delata.

Al inicio de la vista que se sigue en la Audiencia de Ciudad Real se proyectó una grabación de escasa duración, que sólo pudo ver el tribunal y las partes, en el que se muestra a una comisión judicial que se desplazó al hospital de Getafe (Madrid) a ver a la víctima meses antes de que muriera y donde se estuvo debatiendo entre la vida y la muerte durante casi un año.

En aquella visita, la comisión judicial le hicieron algunas preguntas, ante las cuales Vanesa responde con voz casi imperceptible que fue su marido quien la roció de gasolina y la quemó y que quería divorciarse de él.

Durante la primera jornada de la vista, el acusado declaró que "jamás le puse la mano encima, ni la he insultado ni la he pegado" y aseguró que "no sé lo que pasó, no sabía dónde estaba ni qué hacia" el día de los hechos, de los que no recuerda nada.

Sin embargo, a requerimiento de la fiscal se le leyó la declaración que hizo ante el juez instructor al día siguiente del suceso, el 1 de agosto de 2005, cuando fue detenido, en la que admitió haber rociado con gasolina a la víctima, con la que se encontraba en trámite de separación, y haberla prendido luego con cerillas, así como que se arrepentía de lo que hizo.

La fiscalía y las acusaciones particulares, una de las cuales la ejerce el Gobierno de Castilla-La Mancha, califican los hechos como intento de asesinato, maltrato habitual a su esposa y quebrantamiento de condena, por los que solicitan un total de 29 años de cárcel, mientras la defensa considera que hubo un homicidio, por el que pide ocho años, aunque no malos tratos.

El acusado insistió en que no recuerda nada de lo que sucedió aquel día, aunque sí narró con detalle los acontecimientos del anterior y otros precedentes, porque explicó que, desde que la víctima, Vanesa Rodríguez, de 27 años, le denunció por malos tratos y se fue a vivir con su madre, meses antes, él entró en una profunda depresión y que intentó suicidarse dos veces.

Añadió que nunca discutió siquiera con Vanesa pero que si alguna vez lo hizo, fue porque "ella me insultaba", y al declararse inocente de todo afirmó que "no sé hasta la fecha de hoy lo que he hecho".

Horacio B.H dijo también que se enteró hace poco de que su esposa había fallecido (lo que ocurrió el 6 de agosto de 2006, casi un año después de los hechos) a causa de las quemaduras, y que al saberlo deseó haber sido él la víctima.

Sí dijo recordar, en cambio, lo que sucedió el 29 de julio de 2005, un día antes de los hechos, así como los sucesos que llevaron a que ella fuera a comisaría a denunciarlo por malos tratos.