Watts clausura el Festival de San Sebastián dentro del universo femenino de Rodrigo García

La actriz australiana Naomi Watts vuelve a exprimir lo mejor de su talento a las órdenes de un director latinoamericano y, tras "21 gramos" con González Iñárritu, acudió a San Sebastián junto al colombiano Rodrigo García para clausurar el certamen fuera de concurso con "Mother and Child".

El mexicano Iñárritu, no en vano, es el productor de esta película y quien habló a Watts de un guión que contenía, según la actriz, "tres personajes femeninos maravillosos. Y, además, estaba escrito por Rodrigo, al que siempre había admirado", ha explicado en rueda de prensa.

El realizador colombiano da con "Mother and Child" un paso más hacia la difícil labor de desetiquetarse como "hijo de Gabriel García Márquez", avalado además por películas como "Cosas que diría con sólo mirarla" o series de televisión de éxito como "In Treatment".

Y de los tres papeles a los que se refería la actriz de "King Kong", ella pensó que haría el de Karen, una mujer que cedió a su hija en adopción a los 14 años y que vive desde entonces bloqueada emocionalmente. Sin embargo, García le había reservado el de Elizabeth, su hija, quien canaliza el desarraigo con agresividad sexual.

"¿De verdad creéis que siempre he hecho papeles dulces y ahora interpreto a una zorra?", preguntó. "Teníamos muy claro Rodrigo y yo que no queríamos que Elizabeth fuera una villana. El problema es que tiene una necesidad desesperada de exponer el dolor de las personas para compensar el suyo propio".

Finalmente Karen fue interpretada por Annette Bening, pero García, experto desde sus inicios en trenzar historias, suma la de Lucy, una mujer de color empecinada en adoptar un bebé.

"Son mujeres que tienen algo en común: tienen caracteres muy fuerte y son muy controladora, pero no les empieza a ir bien hasta que pierden el control", explica García.

"Son como pájaros a los que se les rompieron las alas en un momento de su vida", complementó el actor Jimmy Smits, conocido por series como "La ley de Los Ángeles" o "El ala Oeste de la Casa Blanca" y que encarna a Paco, un adorable latino que seduce al personaje de Annette Bening.

"Siempre me han gustado, interesado, sorprendido las mujeres. Pero conforme me voy haciendo mayor, me van gustando más los hombres. Esos hombres cuarentones que se niegan a crecer", asegura García, quien no descarta rodar un filme en su país de origen.

"Me encantaría hacer un proyecto allí, pero hay sobre mí demasiadas expectativas. Todo el mundo va a estar pendiente de si va a tener o no relación con los libros de mi padre y eso no me gusta, porque esa sería la noticia y no la propia película", explicó.

Realizada en Estados Unidos y con los signos inequívocos de su director, "Mother and Child" fue recibida con aplausos ante los periodistas acreditados, para los que los diálogos dinámicos, el sentido del humor y el lenguaje directo de la película fue un verdadero bálsamo después de ocho días de cine denso y dramático.

Pero además, García, que siempre ha destacado por su sensibilidad para abordar el error humano, profundiza en la cuestión de la adopción. "Hay muchas emociones implicadas en ella y quería retratar la posibilidad de cambiar de opinión continuamente al respecto".

"Mother and Child", pese a que en la segunda parte del relato llega a terrenos fronterizos con el melodrama, demuestra con frases como "siempre digo la verdad porque es más fácil de recordar" o "¿por qué nadie dice nunca que la adopción no es natural?" que sabe dar en la diana de lo humano sin florituras.

Pero pese a todo, algunos apuntaron cierta colindancia de su visión sobre adopción con el conservadurismo pro-vida. "Si lo que me preguntan es si soy seguidor de Su Santidad el Papa, le diré que no particularmente", zanjó.

Sin las presiones del concurso, la película cumplió sobradamente su función: la de dejar un buen sabor de boca cinematográfico en una edición, la número 57, cuyo palmarés se anunciará a lo largo de la jornada y donde quince películas de disputan la Concha de Oro.