La Xunta de Galicia ha denunciado hoy, ante la Fiscalía de Ourense, la imposibilidad de ejercer la tutela de un menor con obesidad mórbida, por la "obstrucción" familiar.

Esta denuncia fue presentada después de que los padres del menor pidieran una "solución pactada" con el Ejecutivo gallego para mantener la tutela del niño.

Desde la Administración autonómica denuncian la imposibilidad de ejercer la tutela del niño, y acusan a los padres de estar poniendo "en grave riesgo" la salud de su hijo.

Según fuentes de la Xunta, en ningún caso se solicitó a la Policía Autonómica la detención de los padres, a la salida del despacho, al no tener competencias para ello.

"Es la autoridad judicial la que determina la existencia de desobediencia o desacato a la autoridad, y por lo tanto, la única competente para dictaminar una detención", señalaron.

Desde 2005, un equipo conformado por técnicos de la Xunta, Pediatría del Complejo Hospitalario de Ourense y de la concejalía de Servicios Sociales lleva al seguimiento del menor, tras detectar un problema de obesidad mórbida del niño, que con cinco años pesaba 86 kilos.

A raíz de su escasa evolución, el 23 de septiembre de este año, la Xunta decidió asumir su tutela y dictaminó una "situación de desamparo", rechazada por el letrado de la familia.

Concluido el plazo legal para entregar voluntariamente al menor, la Xunta denuncia que la familia lo mantiene oculto, un hecho constitutivo de delito.

Así las cosas, desde la Xunta reiteran que el traslado tutelar "es reversible y temporal" y que en ningún caso, "significa la rotura de la relación familiar".

Ahora será la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Ourense la que se pronuncie a este respecto y quien reclame, en último término, la entrega del menor para su internamiento en el Centro de Menores de A Carballeira.