El Presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, completará esta semana la gira por Oriente Próximo que inició el pasado mes de octubre con la visita a dos países clave en la región, Egipto y Arabia Saudí, con los que quiere explorar las posibilidades de reactivar el proceso de paz entre israelíes y palestinos.

Cuando falta poco más de un mes para que España asuma la Presidencia de turno de la UE, Zapatero volará mañana por la noche a El Cairo, donde el martes se reunirá con las principales autoridades del país antes de viajar a Jeddah para entrevistarse con el Rey saudí.

El periplo podría incluir una breve visita a Qatar y concluirá el miércoles por la noche en Berlín, donde se entrevistará con la canciller alemana, Angela Merkel.

En El Cairo, se celebrará la I Reunión de Alto Nivel hispano-egipcia, por lo que en las reuniones participarán también los ministros de Exteriores y de Fomento y los secretarios de Estado de Turismo y Medio Rural y Agua para impulsar las relaciones bilaterales.

Zapatero, en apoyo a la iniciativa del presidente estadounidense, Barack Obama, para que se reanude el proceso de paz árabe-israelí, quiere conocer la opinión de Egipto, que desempeña un papel fundamental en la región como mediador entre los distintos grupos palestinos e incluso entre Hamas e Israel para la liberación de prisioneros.

El Gobierno reconoce que la atmósfera se encuentra envenenada en estos momentos, pero desea crear un clima favorable al diálogo que evite nuevos brotes de violencia y permita dar pasos importantes hacia la paz durante el semestre en el que España liderará la UE.

Abordará también con el presidente egipcio, Hosni Mubarak, el futuro de las relaciones con la UE y la evolución de la Unión por el Mediterráneo, cuya secretaría general, con sede en Barcelona, todavía no ha podido comenzar a trabajar por el rechazo árabe a sentarse en la misma mesa que Israel.

No obstante, en Moncloa hay confianza en que se desbloqueen las negociaciones para que se pueda celebrar la segunda cumbre de esta iniciativa en junio en Barcelona.

En el ámbito bilateral, destacan en el Gobierno las oportunidades de inversión que las empresas españolas pueden encontrar en el proceso de privatizaciones actualmente en marcha en Egipto en sectores como la energía, los transportes, las telecomunicaciones o el turismo.

Tras almorzar con Mubarak, Zapatero visitará la sede de la Liga Árabe para entrevistarse con su secretario general, Amr Musa, y analizar la denominada "Iniciativa árabe de paz", que ofrece a Israel el reconocimiento árabe a cambio de una retirada que permita la creación de un Estado palestino.

El mismo martes, Zapatero viajará a Arabia Saudí para reunirse con el Rey Abdulá bin Abdelaziz, con quien abordará, además del proceso de paz, las difíciles relaciones de este país con Irán.

Teniendo en cuenta que Arabia Saudí pertenece al G-20 y que es uno de los mayores productores de petróleo del mundo, repasarán también las perspectivas económicas y las posibilidades de éxito de la cumbre mundial del clima de Copenhague.

Está todavía en el aire la posible visita de Zapatero el miércoles a Qatar, ya que el país celebra la Fiesta del sacrificio (conocida como la Pascua musulmana) y hay dificultades para cuadrar las agendas oficiales.

Se realice o no esa escala, antes de regresar a Madrid el jefe del Ejecutivo se reunirá el miércoles por la tarde en Berlín con Merkel.

En la agenda de esta entrevista destacan las estrategias de lucha contra el cambio climático y la crisis económica, la inminente entrada en vigor del Tratado de Lisboa, las relaciones transatlánticas y el futuro de la propuesta rusa para crear una nueva arquitectura de seguridad europea.

Tendrán también tiempo para analizar las relaciones bilaterales y los problemas comunes, como el futuro de las plantas de OPEL en los dos países.