El presidente del Gobierno en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, ha confiado hoy en que el "sufrimiento compartido" de todos los españoles ante el terrorismo permita un entendimiento "sincero y noble" en la nueva legislatura para luchar contra ETA hasta conseguir "el fin absoluto" de la violencia.

"Por nosotros no va a faltar", ha garantizado Zapatero a los diputados y senadores electos de su partido, reunidos por primera vez en el Congreso y a los que ha garantizado que los socialistas dialogarán con todos, pero llevarán adelante con autonomía su propio proyecto político.

Antes de ratificar a las direcciones de los grupos parlamentarios en el Congreso y en el Senado, el líder del PSOE les ha animado a trabajar para favorecer el diálogo y el entendimiento, "a pesar de las actitudes más fundamentalistas" que puedan encontrarse, porque España necesita acuerdos en temas "vitales" para el buen funcionamiento institucional de la democracia.

Esos acuerdos serán necesarios, ha dicho, para mantener y extender los valores de la libertad y la democracia y para acorralar y arrinconar a los violentos, para luchar hasta conseguir el final absoluto del terrorismo, "que sobra radicalmente en un sistema democrático y que tanto nos ha hecho sufrir".

Zapatero ha instado así a los socialistas, que representan, ha señalado, al partido "central" de la vida política española, a ser "el ejemplo, el conductor, el canalizador del dialogo y del acuerdo con todos los grupos".

"Así lo haré como compromiso en la investidura; España necesita acuerdos para los próximos cuatro años y debemos lograrlos", ha manifestado.

Zapatero no se ha referido explícitamente a los posibles pactos con otras fuerzas políticas durante la legislatura, pero ha asegurado que pretende llevar adelante el proyecto político socialista con autonomía.

"Puedo comprometerme ante vosotros que así va a ser; vamos a llevar adelante nuestro proyecto político. Es lo que han votado los ciudadanos y es lo que voy a hacer", ha subrayado.

Pero ha pedido que no se olvide que los socialistas gobiernan para todos los ciudadanos, les hayan votado o no.

Zapatero ha insistido en la defensa del Parlamento -"la clave de bóveda" de la democracia"- y ha pedido "que primen las ideas y se arrinconen los insultos".

En esta nueva etapa, ha abogado por seguir forjando "la convivencia de la España diversa", con un proyecto de país unido en el que la mayoría de las ciudadanos, más allá de sus identidades, se sienta a gusto y respetado.

A ellos se les exigirá cada día, ha dicho también, "su compromiso con ese proyecto común, unido, que es España, una gran potencia económica, social y en derechos, tanto en Europa, como en el conjunto del orden internacional".

El jefe del Ejecutivo ha apostado por poner en marcha el proyecto socialista "con rapidez", porque, ha dicho: "tenemos muchas ganas de hacer muchas cosas y no queremos que los problemas de los españoles esperen ni un minuto".

Entre los retos más importantes, ha destacado el combate de la discriminación y la consecución de la igualdad plena de derechos de las mujeres, sea en las empresas privadas o en el sector público.

Otro reto será, ha apuntado, poner a España "a la altura de los mejores" como una sociedad innovadora, moderna y competitiva, apostando por el desarrollo sostenible frente al cambio climático.

Ha recordado también el compromiso de desarrollar las leyes sociales aprobadas en la pasada legislatura y ha abogado por mostrar al mundo una España europeísta y "gran potencia en el orden internacional", comprometida con los valores de la paz y el desarrollo.

Zapatero ha pedido al grupo parlamentario que permanezca atento "a lo que pasa fuera": "os pido que trabajéis más tiempo en la calle que en los despachos".

Ha apostado así por un grupo "exigente y creativo" y abierto a la sociedad, que acudió masivamente a votar "desmintiendo a los más agoreros" y demostrando que "la sociedad española sabe lo que quiere y acierta cuando decide".

Se ha mostrado dispuesto a estudiar reformas en el Congreso y el Senado, ha agradecido el trabajo de los parlamentarios salientes y ha dado la bienvenida a los "junior", recordando que él también lo fue.