Este artículo se publicó hace 16 años.
Zapatero se reúne hoy con Sarkozy para analizar la respuesta de la Unión Europea a la crisis
El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, almorzará este viernes en el Palacio del Elíseo con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, para analizar la respuesta europea a la crisis financiera internacional.
Sarkozy, como presidente de turno de la Unión Europea (UE), es el encargado de pilotar esa respuesta concertada de los 27 países miembros y Zapatero espera conocer de primera mano las propuestas que llevará al Consejo Europeo, que se celebra la próxima semana en Bruselas.
La reunión con Sarkozy tendrá lugar casi una semana después de la mini-cumbre organizada por el presidente galo en París con los líderes de Alemania, Italia y el Reino Unido, una reunión que no gustó a Zapatero por excluir al resto de Estados miembros y por celebrarse al margen de los cauces comunitarios.
Según explicaron fuentes del Ejecutivo español, Sarkozy propuso a Zapatero mantener un encuentro el viernes pasado, la víspera de esa mini-cumbre, pero el presidente del Gobierno prefirió esperar a que los ministros de Economía y Finanzas de la UE (Ecofin) abordaran de manera conjunta la crisis.
El Ecofin se reunió el martes para dejar claro que la UE no permitirá la quiebra de ninguna entidad financiera que pueda arrastrar al resto del sistema y acordó elevar la garantía de los depósitos para convencer a los ciudadanos de la estabilidad del sistema.
Los ministros se mostraron también de acuerdo con el principio definido por Francia, Alemania, Italia y el Reino Unido de que la respuesta a la actual crisis debe adoptarse a escala nacional, pero siempre en coordinación con el resto de los socios.
Zapatero volará a París tras presidir la reunión semanal de su Gobierno, en la que se aprobarán las nuevas medidas con las que el Ejecutivo pretende frenar en España el impacto de la crisis financiera internacional.
Está previsto elevar a 100.000 euros la garantía de los depósitos de los ahorradores españoles y crear un fondo de 30.000 millones de euros, ampliable hasta 50.000 millones, para comprar activos de bancos y cajas, y favorecer así la concesión de crédito a empresas y ciudadanos.
La crisis será el eje del almuerzo de trabajo pero, previsiblemente, los dos mandatarios abordarán también el resto de la agenda del Consejo Europeo, en la que destaca el pacto europeo de inmigración y asilo, y el futuro del Tratado de Lisboa.
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