Público
Público

'Chinazo' de impacto en la cúpula acristalada de la Estación Espacial

Tiene 7 milímetros de diámetro y ha podido ser causada por una escama de pintura o fragmento de metal de unas pocas milésimas de milímetro. La Estación está dotada de un amplia blindaje para que los impactos no representen una amenaza.

'Chinazo' de impacto en la cúpula acristalada de la Estación Espacial. /Tim Kopra-ESA

EUROPA PRESS

MADRID.- La cúpula acristalada europea 'Cupola' fue añadida a la Estación Espacial Internacional en 2010, y sigue ofreciendo la mejor habitación con vistas que se pueda imaginar. Además de servir como área de observación y trabajo cuando la tripulación opera con los brazos robóticos de la estación, también ofrece excelentes vistas de la Tierra, los objetos celestes y los vehículos que visitan el complejo orbital.

Sus ventanas de sílice fundido y borosilicato de vidrio, sin embargo, sufren impactos por objetos artificiales minúsculos: los desechos espaciales. El astronauta de la ESA Tim Peake tomó esta foto desde el interior de la cúpula el mes pasado, mostrando literalmente un 'chinazo' de 7 milímetros de diámetro producido por el impacto de un pequeño trozo de basura espacial, posiblemente, una escama de pintura o un fragmento pequeño de metal del tamaño de unas pocas milésimas de un milímetro de ancho. El fondo sólo muestra la negrura del espacio.

"A menudo me preguntan si la Estación Espacial Internacional es golpeado por desechos espaciales. Sí. Esta es la prueba en una de las ventanas de nuestra Cupola, que afortunadamente tiene acristalamiento cuádruple", dice Kopra en un comunicado de la ESA.

La cúpula acristalada europea 'Cupola' fue añadida a la Estación Espacial Internacional en 2010, y sigue ofreciendo la mejor habitación con vistas que se pueda imaginar. /ESA

La cúpula acristalada europea 'Cupola' fue añadida a la Estación Espacial Internacional en 2010, y sigue ofreciendo la mejor habitación con vistas que se pueda imaginar. /ESA

Para atender a estas eventualidades, la estación está dotada de un amplia blindaje alrededor de todas las áreas vitales para la tripulación y los sistemas técnicos, por lo que impactos de menor importancia, como éste, no representan una amenaza.

Residuos más grandes sí podrían ser una amenaza seria. Un objeto de hasta 1 centímetro de tamaño podría desactivar un instrumento o un sistema de vuelo crítico en un satélite. Cualquier cosa por encima de 1 centímetro podía penetrar los escudos de los módulos de tripulación de la estación, y cualquier cosa más grande de 10 centímetros podría hacer añicos un satélite o una nave espacial.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?