En la entreplanta primera del edificio Nouvel, una zona de paso entre esa parte ampliada del Museo Reina Sofía y su edificio original, el Sabatini, entre las escaleras y el ascensor, es el lugar escogido por Efrén Álvarez (Barcelona, 1980) para exponer sus diagramas: unos 40 dibujos, tamaño original o ampliados digitalmente, que traducen gráficamente algunos de los más conocidos (¿y aceptados?) teoremas económicos. Manuel Borja-Villel, el director del museo, que inauguró esta semana la muestra, dijo que es un lugar apropiado dado el nombre del programa que la acoge la exposición (Fisuras). El artista, aunque primero decartó cualquier interpretación sobre el lugar escogido, acabó sugiriendo una: 'Todo cristal y hierro', es un buen lugar para criticar al capitalismo.

Ese es el centro casi obsesivo de los diagramas reunidos en Económicos, el título de la exposición: ya se trate de la 'corriente circular del dinero' o 'el único sistema de información superior', todos rascan esa transparente inmaterialidad del capitalismo, convenientemente adjetivado como 'cognitivo', para mostrarlo en toda su crudeza.

Borja-Villel destaca la crudeza de la propuesta del artista barcelonés

Como bien dijo Borja-Villel, Álvarez invierte los gráficos de las teorías económicas y nos los entrega 'hechos vísceras'. Una crudeza que no se refiere sólo a la lectura que propone, sino al propio formato elegido para expresarse: dibujo en blanco y negro, en cierto modo anacrónico, según subrayó Borja-Villel, y en la más pura tradición del fanzine.

En el programa Fisuras se trata precisamente de ver qué es lo que está pasando actualmente en la escena, con lo que el Reina Sofía subraya sobre todo su vocación de Centro de Arte Contemporáneo, frente a su función museística, algo cada vez más asumido por todos los museos. Económicos estará abierta hasta el próximo 30 de abril.

De ahí no sólo la juventud del artista, también la frescura y radical actualidad de la propuesta: detrás de todos estos mapas no-geográficos, explicó Álvarez, hay una gente que creemos que de la técnica del diagrama (un dibujo que relaciona las partes de un conjunto o sistema), aplicada a la comprensión de la sociedad, puede salir algo bueno. ¿El qué? 'Vete a saber', dijo, 'lo que cada uno luego interpreta'.

Álvarez aplica sus diagramas a la comprensión de la sociedad actual

Además de los casi 40 diagramas pegados en los cristales de la entreplanta, hay dos pantallas también donde pueden verse algunos de sus gifs, pequeñas animaciones colgadas en internet. El catálogo es un pequeño fanzine, donde, además de las ilustraciones de la muestra, una sección final titulada El caro ensayo, la barata poesía recoge poemas de algunos colaboradores de Efrén Álvarez: Jeleton, Dr. Oetker, Joe Crespúsculo, Albert Lizárraga, José Álvarez y Eloy Fernández Porta.

Algunas de esas interpretaciones lanzadas a principios de esta semana durante la presentación de la muestra yerran el tiro a juicio del autor. ¿Caricaturas? No, son diagramas, no caricaturas, defendió el artista, al que se le escurrió un comentario apagado: 'Caricatura es lo que les gusta decir a ellos que son', apuntando a los de arriba: 'A esos grandes empresarios con conciencia sistémica dijo que saben cómo funcionan las cosas', según los describió luego.

El fanzine del catálogo recoge una breve colección de poemas

Y frente a quienes vean en esa multiplicidad de secreciones, de flujos de dinero e información, de trabajo que conectan tan profundamente y desgarradoramente a las figuras de Álvarez una condena del mundo, el mismo autor lo desautorizó: '¿Con el mundo? Yo lo llamaría sistema o capitalismo, pero no mundo. No hay nada de misantropía ni nada que se le parezca; al contrario, en todo esto', explicó.

Para él, se trata sobre todo de una forma de 'poesía cívica', comentarios sobre la sociedad. Con su intervención sobre muchas de esas descripciones asépticas de los ciclos económicos a través de sus diagramas, según él mismo señalaba esta semana, Álvarez persigue visualizar relaciones que, como el agua a los peces, nos pasan muchas veces desapercibidas. 'La cultura popular une los campos del conocimiento', se lee en uno de los gifs.