El actor sueco Dolph Lundgren ha reconocido que lleva desde 2015 enfrentándose a un cáncer de riñón. El cineasta lo ha revelado durante una entrevista en el programa estadounidense In Depth With Graham Bensinger.

Durante ocho años ha estado lidiando con la enfermedad. En un momento dado, los médicos le comunicaron que no le quedaban más de dos o tres años de vida. Lundgren buscó una segunda opinión y logró encontrar un nuevo tratamiento que redujo sus tumores hasta un 90% el año pasado.

Duke, el villano de Rocky

Además de en Universal Soldier o The Expendables, el sueco hizo de villano en la cuarta entrega de la saga del célebre boxeador Rocky Balboa. Con 64 años, Lundgren es ingeniero químico y experto en artes marciales. De fuerte carácter y casi dos metros de altura, Lundgren ostenta un currículum dominado por las películas de acción.

Su participación en el reparto de Rocky IV no fue sencilla. En la entrevista contó a Graham Bensinger, presentador del show homónimo, la montaña rusa que supuso su relación con Sylvester Stallone, el protagonista de la saga.

Pero, sin duda, la tónica del programa fue ver cómo su enfermedad le ha concedido una nueva oportunidad en la vida: "El cáncer me ha ayudado a luchar contra los demonios de mi pasado y a reparar las relaciones con mis seres queridos", ha afirmado. De entre los últimos, la hija de Dolph, Ida Lundgren, y su prometida, Emma Krokodil, confirmaron sus palabras. También se le cedió el turno a Alexandria Drakaki, la doctora que ha llevado su tratamiento.

El actor aprovechará el programa con sede en California para visitar Venice Beach, la "meca del culturismo" con Arnold Schwarzenegger, antiguo amigo y compañero de entrenamiento y profesión.