Después de que Camino ganara en 2009 seis Premios Goya, incluido el de mejor película, Javier Fesser aún no ha podido quitarse la historia de aquella niña cuya inocencia era manipulada por un entorno hostil y excluyente como el Opus Dei. Tanto es así que el director presentó ayer la novela Los días de colores, que desarrolla literariamente la película y que ha escrito con su amigo, el también guionista Claro García, entre descanso y descanso del guión de la tercera parte de Mortadelo y Filemón.

4 ¿Es este libro una deuda pendiente para profundizar más en el mundo de Camino'?

J. Fesser: Camino generó un feedback extracinematográfico enorme, que tuvo que ver con experiencias emocionales personales de gente que se puso en contacto conmigo. Por eso, más que una deuda es un placer seguir desarrollando la historia, sabiendo que la película se acercaba a la realidad mucho más de lo que había imaginado al principio.

3 ¿Qué aporta la novela a la película?

J. Fesser: Valía la pena embarcarnos en otra forma de contar esta historia y entrar en nuevos detalles. Volver a contarla con los mismos personajes y circunstancias, pero con otro lenguaje, el literario, era un reto apasionante.

Claro García: Los días de colores es como si la cámara estuviera dentro de los personajes. Conocemos lo que no dicen, lo que están soñando. La película es de ciencias y la novela de letras.

2 ¿Es una novela sobre el Opus Dei?

C. García: Es una novela sobre el amor, la familia, la muerte...

J. Fesser: Y sobre la libertad, no sobre el Opus. Alexia González Barros es un personaje interesantísimo, que fue esta niña que murió en el 86. Ella es mi inspiración. La historia de Camino llegó a la gente porque está contada de manera sincera y honesta. Y sincera y honestamente, mi punto de vista es que el Opus Dei es lo más parecido a una secta. Con Camino me di cuenta de que me había quedado corto retratando el infierno de personas relacionadas con el Opus Dei. Hubo una chica que me confesó que la película la había ayudado a salir de La Obra.

1 ¿La novela es másclara?

Fesser: Hemos verbalizado de forma más nítida lo que pasa por el corazón de los personajes y eso hace que queden más claras las intenciones. Por ejemplo, al hablar de la fe de Camino, que es una fe incluyente, opuesta a la de los que la rodean.