El Valencia, con todo su arsenal, debuta esta noche en la Liga de Campeones ante el Genk. Un desconocido para la mayoría, pero que la última campaña fue la sensación de la Liga belga, proclamándose campeón, por tercera vez en su historia, por delante de Standard de Lieja y Anderlecht.Uno de los artífices de ese éxito del Genk fue Courtois, actual portero del Atlético.

'El año pasado jugábamos diferente. El sistema es el mismo, un 4-4-2, pero éramos más defensivos. Fuimos un equipo que salía rápido al contraataque, qué sólo necesitábamos uno o dos pases para plantarnos en campo contrario', analiza el guardameta.

Ahora, la propuesta del Genk es otra, más atrevida, aunque hasta el momento a Courtois le parece más vulnerable. El entrenador, Mario Been, es nuevo y con él también han llegado jugadores que aún están en proceso de adaptación. 'Este año son bastante más ofensivos, pero están teniendo más problemas atrás. Siguen teniendo buenos atacantes, pero defienden peor; esta temporada están encajando demasiados goles, porque los centrales aún no se han afinado. Uno acaba de lesionarse para siete meses (Joneleit) y el otro (Nadson Ferreira) es lento', revela el belga.

Courtois sufrió su primera derrota como rojiblanco anteel Valencia y sabe por lo que tendrán que pasar sus excompañeros: 'Si el Valencia hace lo mismo que hizo ante nosotros el sábado, normalmente ganará'. Aunque también avisa de varias individualidades que pueden hacer daño: 'El principal peligro para el Valencia será Vossen. Es un rematador rápido que el año pasado marcó 13 goles en los diez primeros partidos. Si está acertado, el Genk tendrá sus opciones. Si la defensa del Valencia no está atenta, les creará problemas seguro'.

El juego de creación, ante la ausencia de De Bruyne, recae en dos futbolistas que le gustan mucho a Courtois: 'En el medio destacan Hubert y Tozser por su calidad. Este último es un excelente lanzador de faltas y córners'. El guardameta también tiene una descripción para el que es su sustituto bajo palos: 'Köteles es un buen portero. Lleva dos años en Primera división y ha demostrado que tiene grandes reflejos. Quizás su punto débil sea el juego aéreo'.

Courtois advierte de lo que le puede esperar al Valencia en el caso de que el Genk necesite una carga final en Mestalla o en su propia casa: 'En Bélgica, cuando queda poco tiempo y el partido está igualado, con empate o un gol de diferencia, el juego consiste en colgar balones. Aquí me sorprende que los equipos dan pases rasos y toquen hasta la última jugada'.

El ambiente que se encontrará el Valencia en Genk será apasionado, pero no con los decibelios que ya ha escuchado en el Calderón o en Mestalla: 'Es un ambiente sensacional, la afición es caliente y canta durante todo el partido, pero el estadio tiene 24.000 espectadores y no impresiona tanto como el Calderón'.