La Audiencia Provincial de Madrid ha rechazado hoy el recurso del aficionado del Olympique de Marsella Santos Mirasierra contra la sentencia que le condenó a 3 años y medio de prisión por agredir a un policía durante un partido de Liga de Campeones entre su club y el Atlético de Madrid.

La resolución, dictada por la sección tercera de la Audiencia madrileña, confirma la condena de Mirasierra como autor de un delito de atentado a agentes de la autoridad con uso de instrumento peligroso en concurso ideal con un delito de lesiones, así como de una falta de lesiones, por lo que la sentencia ya es firme.

Fuentes jurídicas han señalado a Efe que la Audiencia Provincial remitirá ahora su resolución al Juzgado de lo Penal número 20 de Madrid, que dictó la sentencia original y que a su vez la enviará al decanato de los Juzgados de la plaza de Castilla, que la repartirá a un Juzgado de ejecutorias.

Sólo entonces se pondrá en marcha la ejecución de la sentencia para que Mirasierra, que se encuentra en Francia desde que el pasado 10 de diciembre saliera de la prisión de Estremera (Madrid) bajo fianza de 6.000 euros, cumpla la condena.

Los hechos de los que se considera autor al aficionado del Olympique tuvieron lugar el pasado 1 de octubre en estadio Vicente Calderón en el partido de Liga de Campeones contra el Olympique, cuando Mirasierra y otros aficionados del club francés forcejearon con los funcionarios policiales para evitar que retiraran una pancarta.

Minutos después se produjo una situación de confusión y enfrentamiento entre la Policía y los aficionados, durante la que el acusado propinó un fuerte empujón a uno de los agentes haciéndole caer al suelo.

Tras estos incidentes, la Policía terminó retirándose de la grada mientras algunos aficionados intentan golpear con cinturones a los agentes, que finalmente se refugiaron en el interior de la bocana, donde los hinchas franceses -entre ellos Mirasierra, según la sentencia- les lanzaron sillas, una de las cuales alcanzó en la cabeza a un policía.

Por los incidentes, el Atlético fue multado por la UEFA y sancionado con tener que jugar el partido de Liga de Campeones contra el PSV Einhdoven a puerta cerrada.