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La excepción, el baloncesto y el fútbol masculino

El deporte español sólo reconoce dos ligas profesionales

IGNACIO ROMO

En España existe una clara diferencia entre deportistas profesionales y aficionados. La Ley del Deporte sólo reconoce a la Liga BBVA, la Liga Adelante (en fútbol masculino) y la Liga ACB (en baloncesto masculino) con la distinción de competiciones profesionales. El balonmano, por ejemplo, no tiene tal distinción.

Las futbolistas no poseen derechos laborales en nuestro país. No disfrutan del marco reconocido por el Estatuto del Trabajador y ni siquiera disponen de un convenio colectivo. El baloncesto femenino sí fue pionero en 2008 con la firma de un convenio colectivo que acoge a clubes y jugadoras. Un modelo para el resto de deportes, según los expertos.

En el deporte femenino español son contados los casos de profesionales por cuenta ajena. Sólo las baloncestistas y las jugadoras de voleibol disponen de contratos de alto nivel con sus equipos. Las atletas (el club Valencia Terra i Mar también es modélico en este aspecto) son la excepción de un deporte individual con contratos por cuenta ajena con sus clubes. Tenistas y golfistas son ejemplos de profesionales por cuenta propia, a través de contratos privados con patrocinadores .

Milene Domingues, más conocida como Ronaldinha a raíz de su matrimonio con Ronaldo, es la futbolista que mayores ingresos ha conseguido. La brasileña percibió 252.000 euros por una temporada en 2002-03. Estos ingresos se repartieron entre su ficha anual (36.000 euros) y los derechos de imagen (216.000 euros), que incluían anuncios de Dhul y otras marcas del emporio Ruiz Mateos.

Ronaldinha se perdió ofertas sustanciosas como la del Torrejón (que le ofrecía una ficha de 60.000 euros) por la prohibición existente para las extranjeras. Milene fue pionera a su modo: consiguió que la Federación cambiara sus normas y aceptara dos extranjeras por equipo en la Superliga.

¿Cómo se define un deportista profesional?

El Real Decreto 1.006 establece que “son profesionales los que, en virtud de una relación regular, se dediquen voluntariamente a la práctica del deporte por cuenta ajena y dentro del ámbito de organización y dirección de un club o entidad deportiva a cambio de una retribución”.

¿Por qué las futbolistas no pueden ser profesionales en España?

Porque ni los Estatutos de la Federación de Fútbol ni el Convenio Colectivo suscrito por la LFP y la AFE contemplan la existencia de profesionales en el fútbol femenino. No existen licencias ‘P’ femeninas y además, las futbolistas perciben sus honorarios como ‘compensación de gastos’ en lugar de como ‘retribuciones’.

¿Qué limitaciones tienen las aficionadas?

Las futbolistas españolas son aficionadas. Esto les impide disfrutar de bajas remuneradas o cotización a la Seguridad Social. Son muchas las lesionadas que han tenido que abandonar la actividad en España.

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