Algo había insinuado Toni Nadal el jueves. Medio en broma, ante la insistencia de los periodistas ingleses acerca de los planes del número uno respecto a Wimbledon, al tío y entrenador de Rafa Nadal se le escapó una frase: “Mallorca. I’m going to Mallorca”.

Ayer, el español anunció que no se sentía “preparado” para defender el título en el torneo que arranca el lunes. Lo hizo en el propio All England Club, donde hace un año derrotó en una final épica al suizo Roger Federer. Horas antes había perdido otro partido de exhibición [el jueves le derrotó Hewitt] en el exclusivo Hurlingham Club londinense ante el suizo Wawrinka.

El balear no ha logrado superar su tendinitis en las rodillas y aunque se encuentra “mucho mejor que hace dos semanas”, no siente que esté preparado “para enfocar un torneo como Wimbledon”. Nadal necesita descanso. “Quiero tomarme un tiempo para recuperarme y trataré de regresar lo antes posible y con la mentalidad al cien por cien para ganar. El problema ahora mismo es que estoy jugando pensando más en las rodillas que en el partido y así es muy difícil jugar”, explicó.

El número uno enfatizó que no quería “salir a la pista con la sensación de que no sé si voy a estar preparado para ganar y ya no para ganar, para competir”.

Precisamente Nadal reconoció ayer que las molestias físicas no le son ajenas. “Los deportistas convivimos con dolores y realmente uno no sabe dónde está el límite y hasta dónde puede llegar. Realmente creo que en este momento he llegado al límite y necesito una limpieza para volver con fuerza”, añadió.

“Llevo ya nueve meses jugando con dolor en la rodillas y uno va haciendo esfuerzos semana tras semana, pero en Madrid realmente hice otra prueba que me dijo lo que tenía, dos edemas en cada rodilla. He estado trabajando en las últimas semanas con magnetoterapia a diario y con corrientes [electroterapia] otra hora y media más”.

Sin embargo, según su médico, Nadal no está lesionado ahora. El doctor Ángel Ruiz Cotorro, declaró ayer a Público que “simplemente no se siente en condiciones físicas para afrontar un torneo con partidos a cinco sets”. El doctor Cotorro no habla en ningún momento de lesiones –de hecho, ayer jugó sin dolor– sino de “un estado físico global, que no es óptimo”.

“Estamos hablando de un torneo en hierba. Y la hierba es mucho más exigente para las rodillas”. El galeno aplaudió la decisión del mallorquín –”es un gesto que le honra como deportista”– y añadió que “los tratamientos y la fisioterapia que ha recibido estos días, no ha sido suficiente para restablecer sus rodillas”.