A cada catarro invernal el Almería se receta lo mismo: velocidad. Siempre ha tomado la misma píldora cuando la clasificación pedía una reacción inmediata. Crusat, Piatti y Uche rescataron la vieja fórmula magistral para la mejora instantánea del paciente en Sevilla. Faltaba todavía un detalle más para completar el tratamiento. En la portería, Diego Alves borró el mal trago de alguna goleada escandalosa con una prodigiosa actuación en el Pizjuán. Le robó a Kanouté la iniciativa en el lanzamiento de un penalti con el marcador todavía a cero.

Fue un partido de gestos, de instantes, de detalles técnicos individuales. Y es que ninguno de los dos equipos está en su mejor momento como colectivo. La radiografía previa mostraba trece partidos sin conocer el triunfo entre uno y otro. La noche se movió de una y otra portería en una noria con monedas para 90 minutos. Ninguno tuvo la calma para tomar el control.

El Almería, más habituado a situaciones tan oscuras, manejó esa ansiedad por salir del túnel. Vargas puso a su equipo por delante en un despropósito defensivo del Sevilla. Los de Manzano siguieron con el acoso infructuoso a Alves. Entonces, apareció Piatti. Se llevó el partido en el bolsillo con otros dos detalles geniales. Un disparo a la escuadra y un taconazo que llegó tras la enésima carrera de Crusat.

Sevilla (1): Palop; Dabo, Alexis, Cáceres, Navarro; José Carlos (Alfaro, m. 65), Renato (Romaric, m. 65), Zokora, Capel; Kanouté y Negredo (Acosta, m. 77).

Almería (3): Diego Alves; Juanma Ortiz (Lillo, m. 65), Carlos García, Acasiete, Jakobsen; M’Bami, Corona (Valeri, m. 72); Vargas, Piatti, Crusat; y Kalu Uche (Ulloa, m. 87).

Goles: 0-1. M. 47. Vargas remata un despeje de balón a cabezazo de Uche, lo intenta despejar Renato en la línea de gol y el árbitro concede gol. 0-2. M. 81. Piatti, de gran disparo a la escuadra. 1-2. M. 82. Kanouté, a pase de Acosta. 1-3. M. 89. Centro de Crusat y Piatti marca de tacón.

Árbitro: Teixeira. Expulsó a Alexis por doble amarilla (m. 41 y 89). Amonestó a Zokora, Vargas, Palop y Jakobsen.

Sánchez Pizjuán: 30.000 espectadores. Kanouté falló un penalti con 0-0 por manos de Vargas dentro del área.