SEVILLA.- El Sevilla ha celebrado este lunes por las calles de la capital hispalense la consecución de la Europa League, una fiesta arropada en todo momento por los aficionados sevillistas —cerca de 30.000— y que culminó en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán.

La plantilla del pentacampeón de la Europa League, sin los lesionados Andreolli, Krychowiak, Trémoulinas ni Krohn-Dehli y sin Konoplyanka —concentrado ya con la selección ucraniana—, inició desde la calle San Fernando en autobús descapotable un recorrido por las principales calles de la ciudad.

Tras una parada en la sede de la ONCE, el autobús con jugadores, directivos y cuerpo técnico se dirigió a la Puerta de Jerez, donde el capitán Coke y Carriço se subieron a la fuente para ponerle la bufanda y la bandera a la diosa Ceres.

El recorrido prosiguió con parada en la catedral para realizar la tradicional ofrenda a la Virgen de los Reyes, justo antes de detenerse de nuevo en el Ayuntamiento. Allí, fueron recibidos por el alcalde de Sevilla, Juan Espadas.

"El orgullo que tenemos de poder vivir esto con vosotros es muy grande. Gracias al Sevilla y a su afición, esta unión nos da motivos para seguir trabajando", señaló el técnico del cuadro nervionense, Unai Emery.

A continuación, la plantilla salió al balcón de la Plaza Nueva bajo los acordes del himno del Centenario, a lo que sucedieron los parlamentos de técnico y jugadores. Durante ellos, se pudieron escuchar cánticos y peticiones como "Gameiro, quédate".

La fiesta culminó con un gran espectáculo de actuaciones musicales y color en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán, en el que los integrantes del equipo campeón fueron saltando a cuentagotas al escenario, a medida que eran nombrados. En las pantallas del estadio volvió a aparecer el inolvidable Antonio Puerta, fallecido en 2007, y un mensaje de El Arrebato, autor e intérprete del himno del Centenario.

"Sevillistas, somos pentacampeones. Larga vida a los Reyes del Sur", expresó el primero en hablar, el presidente del club, José Castro. "Recuerdo un momento en que llegamos a ser últimos, cuando llegamos a leer aquello de que la afición le está cogiendo asco a la temporada. Eso dolía", señaló Emery. "El camino no es fácil, ha sido una temporada muy bonita y con muchas dificultades, que este equipo ha sabido sortear", añadió.