Torres, listo para golear a los 'reds'

En el tiempo que se tarda en pasar el reconocimiento médico y posar con la camiseta del antiguo enemigo, Fernando Torres pasó ayer a contar maravillas de su nuevo equipo y de lo ilusionado que está con el nuevo reto. "Desde el pasado verano, sentí que tenía que dar un salto en mi carrera y en mi ambición como futbolista. Ahora me uno a un equipo que está en el nivel más alto", dijo en sus primeras declaraciones como jugador del Chelsea.

Torres tocó todas las teclas necesarias. Pasión por el reto y respeto por la afición que deja atrás: "Nunca diré nada malo del Liverpool. He sido muy feliz allí, pero la historia es diferente y juego para el Chelsea".

Por eso, no le preocupa tener que debutar el domingo ante el Liverpool y tampoco la posibilidad de marcar un gol a Reina: "Es el destino".

Lo que los futbolistas llaman el destino hará que el madrileño sea uno de los jugadores mejor pagados de la Premier. Pasa de cobrar unos 170.000 euros a la semana (aquí los sueldos a se dan a la semana) a más de 200.000 para una ficha que rondará los diez millones anuales.

Lo único que tienen que temer los aficionados del Chelsea es que no se repita el caso de Shevchenko. El ucraniano fue el fichaje más caro de la historia del equipo en 2006. Costó 35 millones de euros y sólo marcó 22 goles en dos temporadas.

El Chelsea regateó en el sueldo del surafricano Pienaar, jugador del Everton, y al final se quedó sin el fichaje. Con Torres, no sólo ha desembolsado 58 millones de euros, que se pagarán en cinco años, sino que parece condenado a cambiar la estrategia del juego.

Tener juntos en el campo a Fernando Torres y Drogba le obligará probablemente a jugar con un 4-4-2. La labor de tirarse a la banda era hasta ahora de Anelka, y está por ver quién se ocupará de ella ahora. Si no está lesionado, Torres tiene potencia suficiente como para cubrir más campo que Drogba.

Por muy bueno que sea Torres, el club no habría hecho una oferta de estas dimensiones si no temiera quedarse fuera de los puestos de Liga de Campeones. El club acaba de anunciar pérdidas de 93 millones de euros en el último ejercicio. Sin los ingresos de Europa, la promesa de equilibrar las cuentas del club será irrealizable.

La locura de cifras manejadas en el mercado de invierno de la Premier ha hecho que algunos pidan una reforma. La Liga dice que cualquier alternativa es inviable. Mantenerlo abierto toda la temporada sería aún peor. Ni la UE ni los sindicatos de jugadores aceptarían la prohibición de los fichajes en estas fechas.