La vida debajo de La Roja

Bajo la púrpura del estilo y los éxitos de La Roja, la se-lección española Sub 21 aguarda en Dinamarca su debut en el Europeo de la categoría. Lo hará mañana ante Inglaterra, un hueso, igual que la República Checa y Ucrania, sus otros rivales en la primera fase. Están en juego la corona continental y el billete a los Juegos Olímpicos, a los que España no acude desde 2000. Los tres primeros clasificados estarán en Londres. La Sub 21 no gana un título desde el Europeo 1998. Las categorías inferiores llenan ahora menos las vitrinas que sus mayores.

El prometedor grupo que dirige Luis Milla convive estos días con la sensación de que el estilo es tan prioritario como los objetivos a alcanzar. En ese punto es donde la sombra de la selección mayor se alarga sobre los 23 convocados. Hay tanta exigencia en las formas como en el fin. "La gente quiere ver a esos futbolistas que vienen por detrás de la absoluta. Tenemos una cantera que está rayando a un grandísimo nivel y el revuelo es normal", dice Milla ante la expectación levantada por un grupo en el que están De Gea, San José, Javi Martínez, Thiago, Ander Herrera, Parejo, Mata, Muniain....

Con la Eurocopa y el Mundial conquistados por la absoluta, estos Sub 21 se enfrentan a una situación nueva. Antes, cuando la absoluta no ganaba nada, el fútbol español se preguntaba por qué los pequeños ganaban todo y los mayores no. Ahora, esta selección Sub 21 afronta esta nueva tesitura en la que la comparación con la absoluta será inevitable. "La preocupación por el cómo vamos a jugar no me incomoda ni tampoco las posibles comparaciones. Tenemos un perfil de jugadores que piensa rápido y entiende bien el juego. Las nuevas generaciones vienen así y no vamos a renunciar a nuestro juego, nos sentimos defensores de ese estilo. Jugaremos con lo nuestro y eso es tocar, tener la posesión y esperar a que se descubran las grietas en el contrario. No competiremos en este Europeo pensando en jugar bien y ya está, queremos jugar bien porque creemos que es la mejor manera de ganar", incide Milla. "Los éxitos de la absoluta nos obligan más", ha reconocido Thiago.

El triunfo de la Eurocopa de 2008, que consagró a los bajitos, caló mucho en la planificación táctica de las seleccio-nes inferiores. "Antes, con Iñaki Sáez, también procuramos que jugaran todas las selecciones con el 4-2-3-1, pero desde la victoria en la Eurocopa de Austria hemos incluido también el 4-3-3 por las características de los jugadores que vienen, sobre todo del centro del campo, donde el Barça ha impuesto un determinado tipo de jugador que en esta Sub 21 lo representa Thiago", dice Ginés Meléndez, seleccionador Sub 17 y hombre en el que se apoyó Hierro para unificar y consolidar el estilo en todos los escalafones .

"La clave está en la primera selección que se hace. De estos Sub 21, salvo José Ángel, que empezó a jugar al fútbol tarde y nos apareció ya en la Sub 19, y Rubén Pérez, que le trajimos hace dos años, el resto los hemos tenido desde los 15 años más o menos", razona Meléndez, "Con los jugadores que hemos traído lo normal es que utilicemos el 4-3-3, aunque puede haber variantes puntuales", prevé Milla.

"Hemos instaurado una filosofía de club en la que las selecciones menores son como filiales de la absoluta. Cuando los chicos llegan arriba no se sienten extraños. Además, Del Bosque recibe informes de los mejores en los puestos que más urgencia pueden tener en un futuro próximo", apostilla Hierro, que también ha percibido la expectación levantada y cree que habrá comparaciones con la absoluta: "Si preguntas, seguro que habrá aficionados que no saben qué hay en juego en este Europeo, pero sí hay una gran expectación por ver cómo van a jugar o cómo son los nuevos talentos. Se acaban de televisar por primera vez dos minitorneos de clasificación y el aficionado está enganchado, pero no podemos despegar los pies de la tierra. La absoluta tiene la generación con más talento de nuestra historial. Eso sí, creemos en esta forma de jugar para ganar y esta selección Sub 21 va con esa idea".