El Fondo Monetario Internacional modificó su informe de 2012 sobre la situación de España para rebajar el tono de alarma sobre los pronósticos de la economía del país, con un rescate a la banca a sus espaldas. Entre otros cambios, el FMI sustituyó la perspectiva "desoladora" con la que veía entonces a España por la expresión "muy difícil", según publica este viernes el diario El País. 

Los economistas del Fondo admitieron que las modificaciones se realizaron por motivo de "sensibilidad de los mercados" y para evitar "dar carnaza a los periodistas deseosos de exagerar el mensaje", declaró Martin Mühleisen, director del Departamento de Estrategia, Política y Análisis, según el citado diario.

Mühleisen fue también uno de los que mayor defensa hizo de las modificaciones ante las críticas dentro del Consejo del FMI, que consideraban que los cambios  vulneraban la política de transparencia del Fondo. "El Consejo insiste en la importancia de avisar a los países de los riesgos, pero estas advertencias han sido rebajadas considerablemente”, aseguraba Jose Pedro Fachada, director ejecutivo, según aparece en las actas de las conversaciones que revela El País.

“Estoy en desacuerdo con el señor Fachada. A nuestro presidente le pareció que la versión corregida era más apropiada”, le respondió Thanos Catsambas, otro director ejecutivo del organismo.

Esas mismas actas, según publica por su parte Cinco Días, recogen también críticas a la actuación del entonces Gobierno de Mariano Rajoy. "Desde el mes de marzo, la comunicación de las autoridades españolas ha sido errática. En numerosas ocasiones, las autoridades anuncian una cosa y, unos minutos después, otra diferente", destacaba Fachada.