"Prudencia, responsabilidad y realismo". Esos son los tres ejes sobre los que pivotan el nuevo cuadro macroeconómico que acompañará los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2020 del Gobierno de Sánchez. Por eso el Ejecutivo  ha rebajado al 1,6% su estimación de crecimiento para este año 2020 –desde el 1,8% anterior– y ha elevado un punto la tasa de paro, hasta el 13,6%.

Para los próximos años –hasta 2023– el Gobierno prevé un crecimiento económico estable pero menor al de los últimos años –en 2019 la economía creció un 2%–: asume la desaceleración económica, por decirlo con otras palabras. Así, el Gobierno prevé un crecimiento del 1,5%, que se elevará al 1,6% en 2020 y al 1,7% en 2023. En cuanto al paro, la tasa de paro pasará del 13,6% este año al 13% en 2021 y acabará en el 12,3% en 2023, la tasa que el Ejecutivo esperaba lograr ya este mismo año.

Unas previsiones cautas que sin embargo chocan con el discurso que desgranó en la rueda de prensa posterior al Consejo de ministros la vicepresidenta de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, sobre la fortaleza de la economía española: "Ahora tenemos un crecimiento más equilibrado y más robusto que antes". 

Está claro que el Gobierno ha bajado el suflé económico. Calviño indicó que las previsiones gubernamentales son realistas y están en línea con las de los principales analistas nacionales e internacionales, así que nada por lo que preocuparse. Resaltó también que España seguirá creciendo por encima de la media de la UE en los próximos años."Trazan un objetivo realista y no venden humo como hacía el anterior Gobierno de Rajoy", resumió la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

Calviño destacó que el Gobierno tratará de compaginar el crecimiento inclusivo y la rebaja de la deuda pública al 89% en 2023 –actualmente está en el 96%– y del déficit al 0,9% ese mismo año. 

"Vamos a reducir el déficit y la deuda pública sin poner en riesgo la creación de empleo y el crecimiento. Tenemos muchos elementos positivos pero persisten alteraciones: déficit, deuda pública y la desigualdad. Aún tenemos niveles de desigualdad mayores de los que había antes de la crisis, y en ese contexto en el que han elaborado el cuadro macro", explicó Calviño.