Iberdrola acelerará sus inversiones, hará más contrataciones nuevas que el año pasado y espera aumentar el beneficio neto y el dividendo en 2020, el año en que la economía mundial sufre el azote del coronavirus Covid-19.

Su presidente, Ignacio Sánchez Galán, en una junta que se ha tenido que celebrar de forma totalmente telemática, ha dicho que la inversión será, una vez finalice la situación excepcional en que nos encontramos, la "mejor fórmula", si no la única, para salir de la crisis.

En su intervención y en sus respuestas a los accionistas, ha desgranado que las inversiones de Iberdrola superarán las de 2019 y alcanzarán los 10.000 millones de euros en 2020, ejercicio en el que la compañía espera hacer 5.000 contrataciones nuevas, frente a las 3.500 incorporaciones de 2019, y ha manifestado que espera también que el beneficio neto crezca y, con ello, el dividendo que se distribuye entre los más de 600.000 accionistas de la eléctrica.

El presidente de la eléctrica ha explicado que las inversiones permitirán que entren en operación este año los 9.000 megavatios (MW) de nueva potencia que la compañía tiene actualmente en construcción en todo el mundo (30 plantas fotovoltaicas, 50 parques eólicos terrestres, nuevos parques eólicos marinos, un complejo hidráulico con bombeo en Portugal y redes en Estados Unidos y Brasil).

Sánchez Galán, durante esta junta en la que se ha aprobado un dividendo complementario de 0,231 euros brutos por acción, que sumado al que se pagó a cuenta, eleva la retribución al accionista de Iberdrola con cargo a 2019 a 0,40 euros, ha dicho que esas previsiones se sustentan en la fortaleza económica de la compañía y en su disciplina financiera.

Según Sánchez Galán, Iberdrola cuenta con liquidez suficiente para cubrir 18 meses en un escenario de cierre de los mercados financieros.

Ha señalado que el plan de inversiones previsto, así como la contención de gastos, incluso con el aumento de costes por las medidas extraordinarias contra el coronavirus y desembolsos para adquirir material sanitario para hospitales y personal que lucha contra la Covid-19, permiten esperar un crecimiento del beneficio en 2020 (superando lo 3.406 millones de euros logrados en 2019) y, por consiguiente, del dividendo.

Sánchez Galán, que ha dicho que el compromiso de Iberdrola con la retribución del accionista "no ha cambiado", también ha destacado la política financiera "prudente" de la compañía, que ayer mismo colocó una emisión de bonos verdes de 750 millones con un coste final del 0,91 %.

También ha anunciado que es intención de la compañía contribuir a que sus proveedores puedan mantener el empleo y que Iberdrola ha adelantado pedidos a miles de esos proveedores por más de 3.800 millones de euros, con lo que los acuerdos en curso para entrega hasta 2023 superan los 20.000 millones de euros.

El presidente de Iberdrola también ha repasado las medidas que ha aplicado la compañía (un total de 107) para garantizar el suministro y preservar la salud de empleados y colaboradores frente a la Covid-19, de la que se han detectado 29 casos (21 en España) entre la plantilla de cerca de 40.000 trabajadores que tiene la compañía en todo el mundo.

Asimismo, ha destacado los, al menos 25 millones de euros, que la eléctrica está destinando a adquirir respiradores, trajes sanitarios y mascarillas, entre otro material, para ponerlos a disposición de las autoridades y, además, ha dicho que el coste del aperitivo que se daba en el Palacio Euskalduna, de Bilbao, con motivo de la junta se va donar a Osakidetza, el servicio vasco de salud.

En esta ocasión, Iberdrola no ha podido celebrar su junta y los actos del Día del Accionista en el Palacio Euskalduna por las restricciones impuestas por la pandemia del coronavirus, y la junta, que ha tenido una representación del accionariado del 77,04 %, se ha retransmitido desde la Torre Iberdrola, la sede de la compañía, y los accionistas han participado por los canales que se han puesto a su disposición.

La junta de accionistas ha aprobado la reelección de dos consejeros (Íñigo Víctor de Oriol Ibarra y Samantha Barber) y el nombramiento de dos consejeras independientes: Nicola Mary Brewer y Regina Helena Jorge Nunes sustituyen a Inés Macho y Denise Holt, a quienes Sánchez Galán ha agradecido su labor, en el consejo de administración.

Nuevo vicepresidente

De otro lado, el consejo de administración de Iberdrola ha aprobado, a propuesta o previo informe de la Comisión de Nombramientos, el nombramiento del consejero independiente coordinador, Juan Manuel González Serna, como
vicepresidente de la compañía.

González Serna es presidente del grupo empresarial del sector de la alimentación Siro y miembro de la Junta Directiva de la Asociación Española de Codificación Comercial (Aecoc).

Miembro del órgano rector de la energética desde marzo de 2017, González Serna toma así el relevo en la vicepresidencia a Inés Macho Stadler, que no ha sido propuesta para su reelección como consejera.

En junio de 2018, Iberdrola recuperó la figura del vicepresidente no ejecutivo con el nombramiento de Inés Macho Stadler, un cargo que había desaparecido en 2013 con la renuncia de Víctor de Urrutia.

Además, el nuevo vicepresidente ha sido nombrado miembro de la Comisión Ejecutiva Delegada del grupo, de la que forma parte el presidente, Ignacio Sánchez Galán, Manuel Moreu Munaiz (consejero independiente), Samantha Barber (consejera independiente) y Julián Martínez-Simancas Sánchez (secretario no miembro).