Las alianzas poselectorales decidirán el Gobierno aragonés

PSOE y PP parten de una situación muy equilibrada en Aragón, donde los socialistas gobiernan en la actualidad, en virtud del pacto suscrito con la tercera formación regional, el Partido Aragonés Regionalista (PAR), que mantendrá su papel decisivo de bisagra tras las próximas elecciones del 22 de mayo.

Si hoy se celebrasen los comicios autonómicos, ninguna de las dos formaciones mayoritarias conseguiría alcanzar la mayoría absoluta (34 escaños) en las Cortes de Aragón. Los conservadores conseguirían el 36,5% de los votos y 28 diputados cinco más que en las anteriores autonómicas de 2007 y los socialistas el 36,6% y 26 escaños cuatro menos de los que tienen en el actual reparto de la Cámara.

Según refleja el Publiscopio de Aragón, elaborado a partir de 1.207 entrevistas realizadas entre el 13 y el 15 de abril en las tres provincias de la comunidad, la política de alianzas poselectorales será clave para decidir la Presidencia aragonesa.

El PAR lograría el 8,9% de los votos y seis representantes tres menos que en 2007. Sumadas sus fuerzas, socialistas y regionalistas lograrían 32 escaños en el caso de reeditar la actual alianza de gobierno. Son dos menos de los que precisaría la candidata socialista, Eva Almunia, para garantizarse de forma aritmética la Presidencia de la comunidad.

Con este tablero de tendencias, otras dos fuerzas políticas situadas a la izquierda del PSOE y con postulados difícilmente conciliables con el PAR, emergen con un papel relevante. Son la Chunta Aragonesista, que lograría el 6,7% de las papeletas y repetiría sus cuatro escaños actuales, e Izquierda Unida, que mejora significativamente su representación, obteniendo el 5,8% de los votos, pasando de uno a tres diputados.

El 36,4% de los aragoneses prefieren como presidenta de Aragón en el futuro a la candidata del PP, Luisa Fernanda Rudi. Son un 4,8% más que en el Publiscopio de Aragón realizado en marzo de 2010. El 34,9% prefiere a Eva Almunia al frente del Gobierno aragonés, un 8,6% más que hace un año. Con independencia de sus preferencias, un 40% de los votantes de Aragón pronostican que Rudi saldrá elegida frente al 29,3% que creen que Almunia será la presidenta.

Ambas candidatas tienen una valoración similar por parte de los electores. Almunia logra un 5 de nota media (en una escala de 0 a 10) y Rudi de 5,1. Como elemento de comparación, el actual presidente, Marcelino Iglesias, obtiene una puntuación media de 5,3.

La candidata del PSOE inspira mucha o bastante confianza al 24,7% de los aragoneses y poca o ninguna al 55%, aunque mejora notablemente en estos indicadores respecto a marzo de 2010, al igual que la aspirante conservadora. Rudi inspirar mucha o bastante confianza al 34,1% de los potenciales electores y poca o ninguna al 58,9%.

El 38,3% de los aragoneses aprueba la gestión del Ejecutivo aragonés en esta legislatura frente al 39,9% que la desaprueba. Un 38,8% considera muy buena o buena la actuación de Iglesias como presidente, el 36,1% la juzga regular y el 22,8% mala o muy mala.