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CiU vincula el apoyo al PSOE o al PP al futuro del Estatut

Artur Mas atiza duramente a los socialistas tras dar Zapatero por cerrado el proceso autonómico

ALBERT MARTÍN VIDAL

Artur Mas sacó ayer el látigo y lo hizo para cargar contra el satisfactorio balance que desde el PSOE se ha hecho del fallo del Estatut dictado esta semana por el Tribunal Constitucional (TC).

El presidente de CiU situó a José Luis Rodríguez Zapatero en el epicentro de las críticas por sus 'impropias' declaraciones sobre la resolución del TC, que demuestran, según dijo, 'la frivolidad' del presidente del Gobierno. 'Si tuviese un mínimo de responsabilidad, lo que tendría que hacer es valorar negativamente la sentencia', explicó Mas, que recordó a Zapatero que 'él mismo votó a favor del Estatut' además de pactarlo personalmente con él en La Moncloa. Mas insistió en su lectura negativa del fallo y fue contundente: 'Han ganado los que pretendían desnaturalizar el Estatut, ha ganado el PP, el Defensor del Pueblo y parece que también el PSOE'.

Mas dice que ahoraapoyará al Gobiernopor responsabilidad ante la crisis

Una vez se arrancó en situar a los socialistas al nivel de los conservadores, Mas lanzó una advertencia sobre la política de pactos de CiU para el futuro. Según dijo, el rechazo del fallo será condición sine qua non. Para el líder convergente 'es absolutamente incompatible con CiU tratar con un presidente del Gobierno español, socialista o del PP, que parta de la base de que la descentralización, la autonomía o el autogobierno se han acabado', en referencia a las palabras de Zapatero, que veía en el fallo 'el fin del proceso de descentralización y reconocimiento de la identidad de Catalunya'.

Según puntualizó, su formación no romperá puentes con el Gobierno este año para 'salvar los muebles' de la economía aunque insistió en que Zapatero está 'amortizado' y que 'o hay cambios arriba del todo del PSOE o en cinco o seis meses hay que anticipar elecciones'. Pero su discurso se endureció aún más al recordar a Zapatero el apoyo que dieron en la cámara baja a su reforma laboral hace unas semanas. 'Debería ser extremadamente prudente porque hace un mes su Gobierno dependía de CiU en el Congreso. Que no tiente al riesgo porque la vida es muy larga', soltó. 'No amenazo a nadie', puntualizó, ante la incredulidad del auditorio.

El PSC reprocha al CiU que no recuerde su sumisión a Aznar

No acabaron ahí las palabras de Mas, que enfatizó sus críticas a un fallo que 'afecta a los órganos vitales del Estatut', que enumeró así: 'Nación, lengua, competencias, financiación y justicia'.

Su creciente indignación alcanzó también a la última jefa de filas del PSC en las generales, Carme Chacón, que también apoyó la sentencia: 'Me siento identificado con la posición del presidente Montilla pero no con la de Chacón. El PSC da versiones contradictorias y no hace ningún favor a la fortaleza de Catalunya'.

A la respuesta que los partidos catalanes deben dar a la sentencia se refirió Mas para proponer una resolución del Parlament en un pleno extraordinario. 'Habría una condición: defenderla en Catalunya y en Madrid con las manos libres', dijo, en alusión al PSC. El presidente de CiU no quiso polemizar con la negativa de Montilla a encabezar la marcha del 10 de julio, aunque sí descalificó el intento de salvar con leyes los artículos afectados por el fallo: 'Eso son parole, parole'.

Pero la desatada postura de CiU no es el único obstáculo a la respuesta unitaria del Parlament. ERC presentó ayer un 'balance provisional de los daños' en que veían 'peligrar' cuestiones como la inmersión lingüística en las escuelas si se presentan recursos de particulares y leyes como la de vegueries o de consultas populares.

Fuentes del PSC, por su parte, pedían tiempo antes de valorar la sentencia y criticaban a Mas por sus palabras sobre la política de pactos de CiU. 'No recuerda su sumisión a Aznar durante ocho años y que le impuso el fin de la descentralización autonómica', decía el diputado Francesc Vallès.

Los socialistas descartaban, asimismo, el referendo de ICV. Ante semejante panorama, la formación ecosocialista pedía ayer 'responsabilidad a todas las fuerzas porque lo primero es la unidad'. Vista la carga de Mas contra Zapatero, de momento, ni siquiera se ponen de acuerdo a la hora de escoger el enemigo externo.

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