Público
Público

La coalición Barcelona en Comú plantea una auditoría de las cuentas y entes municipales

La formación presenta su plan de choque para la ciudad, con de cuatro líneas de acción y más de 30 medidas concretas, que suponen una inversión de 160 millones, destinadas a crear ocupación digna, garantizar los derechos sociales, revisar las privatizaciones y acabar con los privilegios.

Ada Colau y el portavoz de Guanyem, Gerardo Pisarello, en la presentación del plan de choque de Barcelona en Comú

ROGER XURIACH 

BARCELONA.- Barcelona en Comú, la coalición en la que confluyen Guanyem, ICV-EUiA, Podemos, Procés Constituent y Equo, sigue desgranando su hoja de ruta de cara a las elecciones municipales del próximo mes de mayo.

Si hace una semana eran los representantes de estas fuerzas los que presentaban de forma conjunta el acuerdo de confluencia alcanzado y arrojaban algunos detalles sobre las primarias que deben validar la candidatura definitiva, este miércoles han sido la activista Ada Colau y el profesor de Derecho Constitucional y portavoz de Guanyem Gerardo Pisarello quienes han presentado, mano a mano, el plan de choque que la coalición espera impulsar durante los primeros meses de mandato, que recoge medidas como elaborar una auditoría municipal, revisar las privatizaciones, favorecer el empleo digno y evitar los desahucios.

El plan de choque se ha elaborado de forma paralela al programa electoral que en breve se abrirá a la participación y validación ciudadana y que será mucho más amplio y concreto.

Este plan, asegura Colau, nace "para hacer frente a la situación de emergencia social", se dirige "a toda la población de toda la ciudad" pero "prioriza las personas y barrios más vulnerables". Ha sido elaborado a través del trabajo compartido con las entidades y plataformas vecinales y consensuado con los técnicos de Barcelona En Comú. Según estima Pisarello, coordinador de la redacción de este plan, muchas de las medidas de este plan no tienen ningún coste pero otras suponen una inversión aproximada de 160 millones de euros durante el último trimestre de 2015 y el primer semestre de 2016. Una cifra razonable, según Pisarello, pues el presupuesto municipal "consta de 380 millones de euros destinados a inversiones". 

Este plan, asegura Colau, nace "para hacer frente a la situación de emergencia social"

Para Colau, este plan es "ambicioso y factible" y a nivel estructural consta de cuatro líneas de actuación básicas y 30 medidas concretas:

1.- Crear ocupación digna
Inversión: 50 millones de euros. Para esta línea de trabajo, desde Barcelona en Comú sugieren poner en marcha un programa de formación y creación indirecta de ocupación sostenible, concentrado en áreas como la rehabilitación energética de viviendas; la prevención y gestión sostenible de residuos; apoyo del tejido comercial de proximidad; atención y cuidado de las personas, especialmente niños y gente mayor y con dependencia; y fomento de la economía cooperativa y de su actualización tecnológica. "Este plan tiene como objetivo crear 2.500 puestos de trabajo en los primeros seis meses", asegura Pisarello.

2.- Garantizar derechos sociales básicos.Inversión: 110 millones de euros. Este bloque comprende seis ejes de actuación, cada uno de ellos con su propio paquete de inversión estimada: el derecho a la vivienda (50 millones), a la alimentación (20 millones), a los suministros básicos (5 millones), a la salud (5 millones), a la movilidad (5 millones) y a una renta municipal complentaria (25 millones). Algunas de las medidas concretas que se han anunciado pasan porque el Ayuntamiento dedique todas sus competencias en evitar desahucios por razones económicas y garantice un relajamiento digno a quien lo necesite, introducir tarifas de agua más justas, crear un fondo específico para atender casos más urgentes de pobreza energética o extender descuentos en bonos de transportes públicos a personas en paro empadronadas en la ciudad. Auditar y corresponsabilizar a las empresas que ofrecen servicios básicos, planteando tasas. Para terminar, Pisarello ha recordado que la coalición hará una política activa de empadronamiento para mejorar el acceso a la tarjeta sanitaria e introducirán una renta municipal complementaria hasta llegar a la renta media de suficiencia de la ciudad, que es de 570 euros.

3.- Revisar privatizaciones y proyectos contrarios al bien común. Inversión: - millones de euros. Frenar, limitar o revisar privatizaciones es esencial para devolver la ciudad a las personas, aseguran desde Barcelona En Comú. Según Pisarello, es necesaria una moratoria "inmediata" en la apertura de hoteles y apartamentos de uso turístico "mientras no haya una auditoría y un estudio del impacto de estos proyectos". Esta idea responde a la voluntad "de hacer limpieza y acabar con privilegios que malbaratan recursos que esta ciudad posee". Más ejemplos concretos como la ampliación de centros comerciales, la creación de una pista de esquí en la Zona Franca o la concesión de la Marina de Lujo del Port Vell "en un barrio castigado como la Barceloneta" son algunos de los procesos a redibujar o, directamente, frenar. Algunos proyectos ya están aprobados y por eso, desde Barcelona En Comú, entienden que la ciudadanía debe poder aprobar el modelo de ciudad final. Corresponsabilizar a las empresas privadas que prestan servicios públicos, reforzar la autoridad pública y obligar a estas empresas a cumplir con sus exigencias.

4.- Auditar la institución y acabar con los privilegios. 
Auditar las cuentas y los entes municipales está directamente vinculado a la aplicación del código ético de Barcelona En Comú. En este eje, Pisarello alude a la reducción de salarios de altos cargos políticos y a la revisión de las subvenciones innecesarias, como coches oficiales, dietas injustificadas. También ha desvelado que las subvenciones que recibe el Circuit de Montmeló -16 millones en la última legislatura- o BCN World Race, o el dinero destinado a las avenidas de lujo de la ciudad serán revisadas de inmediato.

Mañana jueves se presentarán otras 40 medidas que complementarán este plan de choque y se someterán a participación ciudadana. La lista definitiva que encabezará Ada Colau y los nombres que la integrarán, así como el programa electoral con todos los detalles, son dos incógnitas que la coalición no ha querido despejar. Sobre los sondeos, como el recientemente publicado por el Instituto de Ciencias Políticas y Sociales y que da a la coalición el mayor porcentaje en intención de voto, Colau ha pedido "prudencia" porque "este tipo de estudios son parciales y aun nos queda trabajo por hacer".

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias