El diputado de Izquierda Unida por Málaga, Alberto Garzón , el más joven del hemiciclo, conocido también por su actividad en el seno del movimiento del 15-M , manifestó este viernes su sorpresa por la 'mala educación reinante' en el Congreso. Puso como ejemplo de su crítica el debate de investidura de Mariano Rajoy, cuando tras los turnos del PP y del PSOE 'todo el mundo se levantó y se fueron a la cafetería'.

Garzón hizo estas declaraciones en una entrevista en RNE, en la que también relató cómo cuando él o cualquiera de los diputados de los grupos minoritarios hacen uso de su turno de palabra 'el resto de los diputados de los grupos mayoritarios hablan entre ellos'. 'Hablas a los medios, a la ciudadanía', apostilló

Además de acusar al PP de mostrar 'cierta arrogancia', en estas semanas de legislatura Garzón ha constatado que con su mayoría absoluta el PP 'puede hacer lo que le venga en gana', pero con 'un espíritu más democrático podría dejar más espacio'. En este punto, hizo al reparto de las preguntas en las sesiones de control al Gobierno acordado por PP y PSOE, con diez para cada uno de ellos y una para el resto de los partidos.

A este respecto, ha lamentado que las preguntas 'no son vinculantes'. 'Hacemos una pregunta y nos contentan con evasivas, y se dan por satisfechos. Hay muchas deficiencias democráticas', explicó.

Según Garzón, los partidos no mayoritarios están 'relegados a un segundo plano', hasta el punto de que se enteran antes de las cosas por los medios de comunicación que a través de la dinámica parlamentaria, que considera 'complicado romper'.