Un hombre de 32 años y vecino de Marbella ha sido imputado como presunto autor del homicidio imprudente de su hija de 14 meses. El sábado fue hallada muerta en un río de la localidad malagueña de Istán, horas después de que su padre saliera a pasear con ella y después de que se organizaran batidas para encontrarla.

La familia de la pequeña pasaba unos días en Istán, que hoy celebraba el día grande de sus fiestas patronales. En un momento de la noche del sábado el padre salió a pasear con su hija pequeña. Sobre las diez regresó al pueblo. Solo. “Tenía arañazos y magulladuras por todo el cuerpo y síntomas de embriaguez”, explicaron a Público fuentes de la Policía Local. Los agentes le preguntaron qué le había pasado y si necesitaba atención médica. Les contestó que se había caído y que estaba bien. En ningún momento mencionó nada sobre su hija.

Cuando se encontró con su mujer, ésta dio la voz de alarma al no verle con la niña. El imputado no recordaba qué había ocurrido y sólo acertó a indicar el lugar dónde se había caído.

Grupo de búsqueda

Enseguida se organizó un grupo de búsqueda con los tres agentes de la Policía Local y miembros de Protección Civil. Y, a medida que corría la voz sobre la desaparición de la pequeña en las fiestas de la localidad más y más gente se unía a la batida. A las once de la noche ya había más de 400 personas buscando a la niña.

Una hora después la búsqueda tuvo el desenlace más triste: el cuerpo de la pequeña apareció semisumergido en el río Molinos, en una zona conocida como Arroyo de la Luz, cercana al pueblo. La autopsia realizada ayer a la pequeña determinó que murió ahogada por el agua, explicaron a Efe fuentes de la investigación. El cadáver, trasladado al Instituto de Medicina Legal de Málaga, quedó a disposición del juez.

El padre fue trasladado desde el cuartel de la Guardia Civil de Ojén (Málaga) al calabozo municipal de Marbella. Mañana prestará declaración ante el juez de Instrucción número 3.

Istán, un pueblo rodeado de naturaleza

En cuanto uno sale del pueblo se encuentra rodeado de naturaleza. Así describen Istán los que conocen bien el lugar. Hay zonas de regadío y bosque y el terreno es abrupto. De ahí que la búsqueda de la pequeña se viera dificultada. La localidad tiene unos 1.300 habitantes, pero estos días, con motivo de las fiestas, la población se multiplica por tres.