Ser o no ser del PSOE. Esta es la cuestión. La posible candidatura de la dirigente del Partido Socialista de Catalunya (PSC) Carme Chacón a la Secretaría General del PSOE fue de nuevo ayer objeto de controversia entre dirigentes socialistas. Para el expresidente Felipe González, la elección del próximo líder del PSOE no debe girar en torno al origen del candidato. '¿Y por qué no [puede ser catalán]?', replicó a preguntas de los periodistas, tras inaugurar el Congreso de la Asociación de Historiadores del Presente sobre la Historia de la época socialista. España: 1982-1996. Sin citar a la ministra de Defensa, González defendió que lo primero para evaluar al candidato es que sea 'bueno'. Después, vendrán otras cualidades.

La plena legitimidad de Chacón para aspirar al liderazgo del PSOE también fue defendida por Marcelino Iglesias, en su calidad de secretario de Organización y portavoz de la Ejecutiva Federal. 'No hay ningún tipo de limitación para que miembros del PSC puedan participar en una competición electoral para dirigir el PSOE. Por supuesto que no', dijo tras la reunión celebrada por la dirección socialista, a la que pertenece la ministra de Defensa.

Bono cree que debe ser alguien capaz de gritar '¡Viva España!' sin complejos

El secretario general de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, sostuvo que el PSC 'es la cara del PSOE en Catalunya' y cuestionó que la procedencia de Chacón sea un elemento que 'distorsione' a muchos militantes. Vara puso como ejemplo a José Borrell, que en 1998 fue elegido candidato presidencial del PSOE tras ganar unas primarias al secretario general, Joaquín Almunia. En su caso se da la particularidad de que, aun siendo catalán, también militó en Madrid.

La caja de Pandora sobre la idoneidad de Chacón la destapó Alfonso Guerra al afirmar el domingo que la ministra es 'competente', pero tiene como desventaja pertenecer a una formación, el PSC, que se ha 'cansado de repetir que son otro partido' .

Iglesias dice que «no hay ningún tipo de limitación» para los militantes del PSOE

Un argumento que esgrimió ayer José Bono al recordar que los socialistas catalanes 'llevan demasiado tiempo diciendo que no son el PSOE', informa Europa Press. Bono defendió que el futuro líder del PSOE debe ser un 'socialista moderado', 'sin complejos de territorio, de edad ni de clase', 'que no le dé vergüenza gritar ¡viva España!'. Algo que hace con frecuencia Carme Chacón, por el protocolo al que la obliga el cargo de ministra de Defensa.